Los efectos de la tormenta fueron devastadores.

Los fallecidos en la riada hallados ayer vivían en una tubería

Más de 300 viviendas afectadas y cultivos e invernaderos arrasados son efectos del desastre

José Ramón Villalba

Miércoles, 9 de septiembre 2015, 00:36

Hasta el martes la fuerte riada que vivió la Costa había dejado tres muertos y un desaparecido. Ayer apareció el cadaver de Stepa, un lituano ... de 63 años. Su cuerpo fue arrastrado 28 kilómetros desde el barranco de la Angostura donde vivía junto a otras cuatro personas hasta el lugar donde apareció flotando en el mar. 'Residía' en el interior de una tubería de hormigón, una especie de desagüe por el que nunca pasaba el agua, junto a un invernadero, de unas dimensiones de cuatro por cuatro, donde sólo cabían cuatro colchones y apenas unas bolsas de plástico llenas de ropa. Otro compañero de 'piso', un lituano de cincuenta años, apareció muerto el lunes sobre las siete y media de la tarde en el Paraje del Pago, junto a la rambla de Albuñol, a un kilómetro y medio del hogar en forma de tubería. Y queda un tercero, Nicolai, un ruso de 41 años, desaparecido desde el lunes y a quien los efectivos de la Guardia Civil, Protección Civil y vecinos de la zona siguen buscando, aunque las esperanzas de encontrarlo con vida merman conforme el minutero del reloj sigue avanzando.

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El primer fallecido fue un vecino de Gualchos de 61 años de edad que tampoco sobrevivió a la fuerte tromba de agua.

Hay más de trescientas viviendas afectadas por daños, doscientas de ellas ubicadas en Albuñol, localidad donde las canalizaciones del agua han quedado inutilizables, no funciona el alumbrado público y el suministro telefónico lo comenzaban a recuperar ayer de forma intermitente. Los destrozos en invernaderos y cultivos se extienden a Sorvilán, Albondón, Polopos, Rubite, Ízbor, La Rábita, El Pinar, Órgiva y Lanjarón, sólo por citar donde se han localizado los principales efectos de la tormenta.

Los alcaldes de los municipios afectados, el subdelegado del Gobierno, Santiago Pérez, el consejero de Medio ambiente, José Fiscal, así como el presidente de la Diputación, José Entrena, mantuvieron ayer un encuentro para poner en común las ayudas que pueden recibir los afectados y conocer los daños. Antes de empezar esa reunión se guardó un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas en la puerta del Ayuntamiento de Los Gualchos-Castell de Ferro. Una vez finalizado ese minuto de silencio, el coronel de la Guardia Civil, Manuel Llamas, quien pisó el barro de la zona para asistir en primera fila a las labores de búsqueda, informó del hallazgo del tercer cadáver.

Por su lado, la organización agraria COAG solicitará ayudas a la administración por los daños ocasionados en los invernaderos de la costa de Granada.

El servicio de emergencias del 112 atendió 23 incidencias entre las 00.00 y la 1 de la madrugada de ayer, como la de la iglesia de la Rábita, que se inundó de agua tras las copiosas precipitaciones registradas en la zona a esa hora.

Aemet anunció alerta amarilla para hoy en la Costa. Mientras, el tercer inquilino de la 'tubería de los horrores' sigue desaparecido.

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