Pide ayuda para sus abuelos ingresados por coronavirus en Granada y los sanitaros le sorprenden: «Es un rayo de esperanza, ahora sé que no están solos»
Eva lanzó un mensaje de socorro en redes sociales para buscar alguien que «diera calor» a sus abuelos en unos momentos muy complicados
alberto flores
Granada
Jueves, 18 de febrero 2021, 12:06
La magia de las redes sociales, eso era lo que buscaba Eva, una granadina de 24 años que desde hace unos días tiene a sus ... abuelos ingresados por coronavirus en el Hospital Virgen de las Nieves. «Mis dos abuelos están ingresados y si alguien trabajara allí y pudiera arroparlos un poco sería de gran ayuda», con ese mensaje buscaba una manera de que sus abuelos no estuvieran tan solos. Inicialmente no tenía mucha fe en encontrar ayuda en su petición. Sin embargo, en tan solo unas horas su mensaje había llegado a miles de personas y contaba con cientos de respuestas.
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«Al principio no sabía si enviarlo porque pensaba que no lo iba a leer nadie», confiesa Eva, que aunque antes vivía con sus abuelos desde hace un mes está en Navarra con su pareja. «Buscaba alguien que pudiera subirles el ánimo, estar cerca de ellos, y la respuesta que he recibido ha sido increíble». Trabajadores de cocina, limpiadoras, enfermeros, médicas… Todos ellos con el mismo objetivo: ofrecer a Eva la ayuda que, desesperada, había solicitado.
Su abuelo lleva una semana ingresado en planta, mientras que su abuela llegó ayer al hospital y ahora está en la UCI, algo de lo que se enteró a raíz de su mensaje. «Esta mañana una médica me ha escrito para informarme de que han ingresado a mi abuela en la UCI, si no fuera por el mensaje en redes sociales todavía no sabríamos nada». Pese a los duros momentos que están pasando Eva y su familia, la granadina asegura que está muy agradecida porque le han ayudado mucho.
«Pudieron decirles que su nieta les envía saludos y darles mucho cariño», cuenta emocionada. Su gran miedo era que sus abuelos se sintieran solos y ahora sabe que están «en cuidados de las mejores manos posibles». «Tenemos un personal sanitario de diez, no todos estarían dispuestos a ayudar y me han demostrado mucho amor y vocación. Ojalá todo el mundo que tiene a familiares ingresados tuviera la suerte que he tenido yo», asegura Eva, que admite que entre tanta mala noticia todo esto le ayuda a mantenerse positiva. «Es un rayo de esperanza entre tanta oscuridad que te reconforta. La situación es mala pero hay gente fantástica al pie del cañón».
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