El control del precio de la energía deja una caída del IPC de casi dos puntos en Granada

En concreto, el descenso de la inflación interanual alcanzó los 1,9 puntos porcentuales en el mes de septiembre en Granada, hasta quedarse en el 8,9%, tras alcanzar su récord de todos los tiempos en julio, cuando el indicador fue del 11,1%. El principal elemento que tira hacia abajo del IPC, según los datos del organismo estadístico nacional, corresponde a la partida de gastos dedicados a electricidad, gas y otros combustibles. Hoy es un 28,4% más costosa para el bolsillo del ciudadano que hace doce meses, pero en agosto la cifra había alcanzado el 56,6%; es decir, que en un solo mes ha caído a la mitad.

Esto se debe principalmente a dos factores: por un lado, las medidas tomadas desde las administraciones públicas nacionales y europeas, como el tope al precio del gas asociado a la excepción ibérica de España y Portugal, o los descuentos o reducciones de impuestos en la factura eléctrica o los sistemas de transporte;del otro, un barril de crudo Brent que continúa con precios a la baja y ha estabilizado el coste del carburante. Precisamente los servicios de transporte, con un 11,1% de caída en un mes en la provincia, son la segunda categoría que más reduce su inflación.

La principal preocupación, además del coste energético, sigue estando en el precio de los alimentos de la cesta de la compra, una de las variables más lesivas para la mayor parte de ciudadanos. Las cifras del IPCde septiembre indican que la subida ha comenzado a estabilizarse, con un incremento en treinta días del 0,3%.

Pese a este dato, la inflación de los alimentos marcó el mes pasado el dato máximo de una serie histórica que, a nivel provincial, abarca los últimos veinte años. En concreto, esta categoría de productos es hoy un 16,4% más cara que en el mismo momento de 2021, algo que está a su vez influenciado por factores como el propio coste de la energía y el encarecimiento de los fertilizantes. Desde junio, todos los valores superan los 16 puntos porcentuales, una cota que duplica los récords previos. Por ponerlo en contexto, el dato del IPC más alto en este sentido en Granada no registrado en 2022 se produjo en enero de 2008, al albur de la crisis económica que se desataría de forma definitiva unos meses más tarde. Entonces, el encarecimiento interanual fue del 7,8%; es decir, que las cifras actuales duplican con creces las cotas máximas previas.

En este contexto, prácticamente todas las grandes categorías de productos y servicios que analiza elINE para actualizar su estadística son hoy más caras que hace un año en la provincia granadina, desde el transporte hasta los bares, pasando por el coste del acceso a la enseñanza. Solo se libran de esta tendencia los productos de telecomunicaciones (-2,4%) y el vestido y calzado (-1,8%).