Comienzan las pruebas a los contactos cercanos del alcalde

El granadino que pasó por la plaza del Carmen se encontró con las puertas del antiguo convento cerradas. Las cámaras grababan una furgoneta blanca, un cartel azul que impedía el acceso al edificio y al policía que explicaba que no habría atención presencial, ni a turistas ni en el registro. Del Ayuntamiento, disfrazado de domingo, sólo salía al furgón un operario equipado con una vistosa mascarilla. Con un aparato fumigó desde los despachos a la oficina de turismo, del salón de comisiones a las dependencias de los grupos municipales. Esta operación requería varias horas de margen para garantizar la desinfección, por lo que el concejal de Recursos Humanos y Organización, Francisco Fuentes, decidió sobre el terreno cerrar hasta hoy martes, cuando el edificio –así estaba previsto ayer– abrirá de nuevo con normalidad.

Por el edificio consistorial pasan, en un martes normal, unos 200 ciudadanos que acuden al registro y los turistas que pasan por la oficina de información, junto al hall en el que trabajan una o dos parejas de la Policía Local. También los funcionarios de la casa y los 27 concejales. Además, una decena de periodistas que acuden a las convocatorias de prensa.

La atención en la oficina turística y en el registro quedaron suspendidas: el policía derivó a los primeros ciudadanos que acudieron a plaza del Carmen a otras oficinas municipales, a otros se les dio atención por teléfono y a los demás se les avisó del aplazamiento de la cita. Con respecto a los actos del día, tanto el equipo de gobierno como la oposición cancelaron sus comparecencias en el interior del inmueble.

La primera, de un concejal del equipo de gobierno, estaba prevista a las nueve y media. Una hora más tarde, el alcalde y la concejala de Cultura tenían que presentar en el Cuarto Real la Semana del Libro, pero anunciaron que no asistirían. Los grupos de la oposición, bien a las puertas del Consistorio o por comunicado, cargaron contra el alcalde –previo deseo de que el virus no produzca síntomas–.

Despertaron así una polémica que había anticipado en la noche anterior el portavoz de Vox, Onofre Miralles. Varios concejales aseguran que el asesor que habría transmitido el virus a Salvador –sus últimos contactos sin mascarilla fueron un aperitivo el viernes, tras el pleno, y un café en el fin de semana– ya tenía síntomas antes del lunes. Miralles aseguró que el colaborador no trabajó el lunes, que el alcalde lo sabía y pese ello mantuvo su programación del día –inauguró un congreso gastronómico y celebró reuniones–.

Compartió despacho con el nuevo presidente provincial del PP y alcalde de Alhendín, Francisco Rodríguez, que paralizó ayer su agenda. La mantuvo su homólogo socialista y presidente de la Diputación, José Entrena, que coincidió con el alcalde en la inauguración de un evento gastronómico pero no estuvo más de quince minutos a menos de dos metros.

Antes, durante el fin de semana, el alcalde participó en varios actos. El viernes presidió el pleno municipal durante cuatro horas. El sábado estuvo presente en el certamen Granada de Tapas Gastronómicas y luego participó en los cultos en honor a la Patrona de Granada, la Virgen de las Angustias, junto a otros miembros de la corporación. Ya el domingo acudió a la plaza de toros a la exhibición de carruajes tirados por caballos, un acto benéfico a favor de Granadown.

Según fuentes municipales, sólo hay dos positivos notificados en el entorno del alcalde. Ningún concejal del PP guardará cuarentena, al no haber cumplido con los criterios de contacto estrecho. Dos ediles de Ciudadanos estarán, como el alcalde y su asesor, en aislamiento. Durante los próximos días se conocerán los resultados del rastreo a sus contactos cercanos, los incluidos en la lista facilitada por el propio Salvador. El Ayuntamiento se 'desconfina' hoy tras el parón de 24 horas, por ahora sin convocatorias de los concejales.