Brotes verdes y de colores en el pequeño comercio de la calle Molinos del Realejo
Un local de productos gourmet franceses, una floristería, una librería 'Tremenda', la nueva panadería boutique, una perruquería y la tienda de El Niño de las Pinturas consolidan en dos años el barrio de Granada. La oferta hostelera despega con dos lugares, Capitán Amargo y Carlota Braun
El barrio del Realejo de Granada mantiene todo su sabor y sus peculiaridades. A un paso del Centro de la ciudad, es Centro y es ... barrio a la vez, con sus personajes y sus protagonistas. Antes de la pandemia, sus calles comenzaron a llenarse de maletas rodantes de los turistas que buscaban alojamiento para conocer Granada. Comenzó un proceso de gentrificación, o de turistificación que amenazaba de forma directa al ambiente, al comercio y a los servicios que dispone el Realejo.
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Los vecinos siempre tuvieron entonces en boca el caso del Albaicín, que en los últimos treinta años se ha convertido, según denuncia la asociación de vecinos del barrio Patrimonio de la Humanidad, en un parque temático para turistas. Un lugar, además, donde apenas hay servicios y comercios y donde la despoblación ha logrado que el Albaicín haya perdido su personalidad. Un ejemplo, ya no hay niños que jueguen en sus empinadas calles, en sus recoletas plazas.
El Realejo sobrevive por el momento y, de hecho, ha visto que en los dos últimos años han florecido numerosos comercios de todo tipo. La calle Molinos, el eje comercial y vertebrador de la vida social del Realejo, es testigo en estos momentos de la apertura de seis negocios que han logrado consolidar el pequeño comercio en el barrio.
Desde la Plaza del Realejo hasta la Cuesta de Escoriaza, en un recorrido por la calle Molinos se descubre una tienda de productos gourmet franceses, la librería Tremenda, la perruquería canina de Cristina, la tienda de El Niño de las Pinturas y el la floristería Colmado Verde de la esquina frente al Teatro Alhambra. Son brotes verdes y de todos los colores que han logrado asentar el pequeño comercio en el barrio de Realejo, donde sus vecinos los han recibido con brazos y carteras abiertas.
Chez François
François es un tipo encantador. Te dice rápidamente que François se dice «fransua», la versión francesa de Francisco, y que abrió unos días antes del confinamiento de marzo del año 2020, lo que fue un desastre para su negocio. Pero ahí sigue, con su sonrisa, atendiendo con elegancia y galantería. Sobreviviendo.
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Conoció España a través del Camino de Santiago, que realizó dos veces. Granada a través de una amiga que conoció precisamente en el Camino de Santiago. Lo demás fue un cúmulo de detalles, pero al final, dejó de trabajar en una empresa de satélites como ingeniero y se vino a la ciudad de la Alhambra y la llenó de quesos, vinos y patés.
Dirección: Cuesta del Realejo, 1
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Tremenda Librería
Luciana es argentina y Alberto es madrileño. Vinieron a vivir a Granada y siempre que pasaban por el local que actualmente es Tremenda Librería pensaban que era el lugar que estaban buscando. Dicho y hecho, gracias a un servicio de ayuda a los emprendedores del Ayuntaiento de Granada, lograron abrir su negocio y ya han cumplido un año y dos meses de vida. Están encantados.
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Alberto explica que era el momento de que el Realejo tuviera su librería. «Hemos dado en el clavo. El barrio sufre fuertes presiones gentrificadores y los vecinos no quieren peder su ambiente de buena vecindad, así que nos han recibido encantados».
Dirección: Calle Molinos, 22
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Masa Madre
A Mario le gusta que los panes salgan bien. Y los planes, también. Abrir un despacho de pan en un barrio que en menos de doscientos metros cuenta ya con otras tres panaderías era un reto. Pero la prueba ha sido superada y Mario está encantado con su panadería y con su clientela.
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La panadería es una tienda más del negocio familiar, Caballero y Baena. Su mejor producto es el pan de Alfacar, casero y artesanal, de fabricación propia. Además, su vitrina muestra tood tipo de dulces, pastas, roscos y bollos. Una delicia.
Dirección: Calle Molinos, 35
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La Tienda de El Niño de las Pinturas y Mítica Tattoo
El Niño de las Pinturas Shop, es la tienda oficial de los productos del artista granadino SEX, El Niño de las Pinturas, abierta este pasado verano, ofrece los dibujos del grafitero granadino en formatos portables como láminas, posters, cuadros etcétera. También se pueden comprar sus libros.
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El local combina los productos del grafitero con un esttudio de tatuaje, Mítica Tattoo, donde puedes ponerte tinta en la piel a partir de treinta euros. Hay dos tatuadoras que harán maravillas: Lorena y Ángela.
Dirección: Calle Molinos, 42
Redes Sociales: Instagram / Instagram Mítica Tattoo
La Perruquería de Cristina
Canela está tan a gustico, feliz, recién lavada y a punto de ser peinada en lo que serán un sinfín de caricias y arremacucos. Cristina, de 24 años, es su perruquera y ama a los animales. También le gusta mucho la peluquería, así que su destino estaba bastante definitivo. Cristina cuenta que tiene todo tipo de tratamientos para estas mascotas, desde 12 hasta los 60 euros.
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Cristina cuenta que es una peluquería canina en positivo. «Ofrecemos todo el cariño del mundo en peluquería, baños, corte de uñas, tratamientos dermatológicos... Usamos variedad de productos específicos veganos para cuidar de tus queridas mascotas». Cristina abrió en octubre de 2020 y va tirando. «Ser autónomo es muy difícil», reconoce. Pero también es verdad que eligió el Realejo «porque aquí no tengo competencia». Mientras va consolidando su negocio, Cristina al menos sonríe sin parar al estar siempre en muy buena compañía.
Dirección: Calle Molinos, 47
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Floristería Colmado Verde
Luisa también abrió en el año 2020, en lo más duro de la pandemia. «Quería tener una tienda en el Realejo y esta es la esquina que encontré». Luisa personifica el problema de la gentrificación y de la muerte del alma de un barrio. En su caso, vivió treinta años en el Albaicín, y al final decidió mudarse al Realejo. «Me fui porque estaba harta porque se ha convertido en un parque temático para turistas. Y ya no hay tiendas ni ambiente ni vecinos ni nada. Solo turistas«.
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Luisa es experta en jardinería japonesa, y realiza unas creaciones fantásticas que adornan su local con grandes ventanales. También saca sus plantas a la calle, con lo que la esquina se convierte cada día en un pequeño jardín verde y floreciente. «Han sido momentos muy duros para sacar adelante el negocio, pero creo que esta primavera podré remontar», comparte esperanzada.
Dirección: Calle Belén 1, esquina con calle Molinos
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Carlota Braun, música en directo y mucho más
Carlota Braun es otra fórmula de hostelería que ha abierto en la calle Molinos. El negocio del hostel se abrió en junio de 2021 y el restauranto en octubre . Decidieron instalarse en el Realejo porque «somos una familia afincada en el Realejo desde hace más de 33 años. Mis padres se mudaron al Realejo estando embarazados de mí. Por tanto, conocemos muy bien el barrio y el potencial que tiene. Nos salió la oportunidad de comprar la casa y tras estudiar diferentes opciones decidimos apostar por un hostel con un bar y reataurante con auditorio que nos permitiera dar comidas mientras hay música en directo». Carlota Braun ofrece una decoración inglesa estilo años 70 pero con toques modernos como son los neones o leds de color.
Carlota Braun es, al final, un hostel con bar, restaurante y auditorio. Es una cocina mediterránea de fusión. «Apostamos por productos locales pero dándoles un toque de otros países para hacerle un guiño a diferentes cocinas del mundo. Tenemos platos vegetarianos y veganos para que todo el mundo tenga su espacio en el Carlota Braun».
Es interesante saber que gran parte de lo que consumen lo compramos en tiendas del barrio. «Las verduras y frutas las compramos en fruteria Amalia que es una frutería de toda la vida del barrio, por ejemplo».
En cuanto al estilo musical que trabajamos son directos en acustico amplificados (aprovechamos mucho la insonorización que tenemos) con estilos musicales desde jazz (todos los jueves tenemos fijo un trío de jazz) a sesiones de soul, funk, groove y estilos musicales de los años 70, 80 y 90«.
Respecto al resultado, hay esperanza. «No podemos estar más contentos tanto por la afluencia de gente como de las críticas que recibimos. Y eso gran parte de la culpa la tiene equipo que trabaja detrás y en primera linea del Carlota Braun que sin ellos, no sería posible».
Dirección: Calle Molinos, 5
Página web de Carlota Braun
De Colagallo a Capitán Amargo, pero con todas las rubias de la ciudad
Ismael abrió hace ya varios años el Colagallo, un pub con gran ambiente nocturno. Este pasado verano cambió de dirección al negocio y lo rebautizó como Capitán Amargo para olvidarse de las largas noches de copas y convertirse cien por cien en la clásica cervecería con todo tipo de cervezas artesanales, hasta 36 diferentes, buena comida con parrilla y una terraza en la mismísima calle Molinos.
Dirección: Calle Molinos 28
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