El 'colapso' en los trenes de Málaga deja a Granada sin billetes

Para el trayecto de vuelta también empiezan a reducirse las opciones: solo quedan plazas a precio básico en el AVE de las 7.12 y para una combinación a las 8.15. Es una situación que se repite desde el inicio del curso y que no tendrá solución a corto plazo. El 'colapso' en los trenes Málaga-Madrid afecta también a las opciones de viaje con origen o destino Granada.

Granada solo dispone de tres conexiones directas con Madrid cada día. Cuando el AVE entró en servicio se llegó pedir un cuarto tren -reclamado por empresarios y hosteleros- que quedó aparcado por la pandemia y que no ha llegado a estar en los cuadrantes de Renfe. Estos servicios se ven complementados por las opciones con transbordo en Antequera o Córdoba, que -según el día y el sentido del trayecto- llegan a duplicar las posibilidades de viaje entre Madrid y Granada sobre raíles.

Estos servicios los cubren trenes de alta velocidad con origen o destino Málaga que hacen parada en Antequera o en Córdoba. El problema para Granada es que los vagones entre Málaga y Madrid suelen llenarse -en días y horas punta- desde hace meses. Al ir completos desde la ciudad de origen o llegada, no quedan plazas disponibles para los servicios combinados que enlazan con la estación de Andaluces, lo que limita de forma indirecta las comunicaciones granadinas. Por ejemplo, solo la mitad de los doce trayectos desde Málaga a Madrid para este viernes tienen billetes disponibles.

La mala situación de las conexiones ferroviarias en la capital vecina, que se agudiza los fines de semana, lleva meses despertando críticas entre viajeros y empresarios. Málaga aún no ha recuperado el número de frecuencias previas a la pandemia, hasta 14 al día. Según Renfe, uno de los factores que afectan a la recuperación de la parrilla habitual es la falta de trenes. Otras fuentes añaden otro problema: también hay déficit de maquinistas.

En julio, Renfe anunció un retraso en la entrega de un lote de trenes fabricados por Talgo e inició un análisis del contrato con esta empresa para estudiar posibles acciones penales. Debían haber sido entregados para entrar en servicio el pasado verano: las primeras unidades debieron quedar disponibles para Renfe en enero, según este comunicado.

El lote está compuesto por una treintena de trenes de alta velocidad, la mitad preparados para circular también por vías de ancho convencional, que suponen una inversión de 786 millones. Permitirían mejorar la oferta de AVE y larga distancia «por ejemplo, en los servicios entre Madrid y Santiago de Compostela, A Coruña, y Vigo, con mayor número de frecuencias, mayor oferta de plazas y reducción de tiempos de viaje en algunos recorridos».

Indirectamente, la llegada de estos trenes supondrá también mejoras para Málaga y Granada. Renfe lleva años con la flota congelada pero ha estrenado nuevas líneas de alta velocidad como la Madrid-Orihuela, Madrid-Ourense o Madrid-Burgos. Esto ha reducido el número de unidades disponibles, impidiendo que Málaga y Sevilla vuelvan a la normalidad prepandemia, descartando la opción de un cuarto tren directo Granada-Madrid y, de forma indirecta, reduciendo las posibilidades de viaje con transbordo con origen o destino en la estación de Andaluces.