La Azucarera acogerá nuevas intervenciones este otoño para el traslado de investigadores
Las obras serán para la adaptación de la nave de enseres de la destilería con financiación gubernamental
Los pasos están dados para que la primera gran obra de la Azucarera de San Isidro empiece en octubre o cuanto antes. Lo cuenta el ... vicerrector de Investigación y Transferencia de la Universidad de Granada (UGR), Enrique Herrera, en referencia a las intervenciones previstas para la adaptación de la nave de enseres de la destilería. El objetivo es convertirla en espacio de trabajo para algunos grupos de investigación.
Publicidad
Se trata de un nuevo espacio en unas dependencias que requerirán de mucha financiación y para el que, de momento, hay comprometida una partida del Gobierno central de unos nueve millones de euros. La adecuación total, de todas las naves, según las primeras valoraciones, superará los 80 millones de euros. Queda mucha tarea por hacer y puertas a las que llamar para conseguir financiación para darle forma al gran campus sostenible que ha proyectado la Universidad granadina.
Las máquinas entrarán en la zona de la derecha, conforme se mira de frente a las naves centrales, donde brilló la industria azucarera. Mirando cara a cara (está en la esquina izquierda) a la nave ya adecuada en la que están instalados los equipos de los investigadores de la Unidad de Investigación de la Madera Estructural de Andalucía (UIMA).
El Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana licitó esta primera actuación por 1.578.332 euros para la conservación y adaptación de la nave de enseres de la destilería de la Azucarera de San Isidro para espacios de trabajo e investigación de la entidad granadina (en mayo). También incluye trazados de obras ordinarias de redes de infraestructura interior.
Publicidad
En aquel momento, se concretó que la intervención se enmarca en la primera fase de un plan integral para la recuperación del conjunto de naves de la destilería de la Azucarera, declarado Bien de Interés Cultural en 2015. El proyecto ha sido redactado por el arquitecto Juan Moreno Romero y será gestionado por la Unidad Técnica de la Universidad. La actuación contempla la rehabilitación de 374,91 metros cuadrados de superficie construida y más de 1.800 metros cuadrados de urbanización en la plaza de los depósitos. La nave de enseres se adecuará como espacio de trabajo para algunos grupos de investigación.
Esta primera intervención se enmarca dentro de una global para recuperar todo el conjunto de naves de la destilería y la nave almacén de pulpa con fachada lateral a la plaza de los depósitos. Por el elevado importe de la actuación se consideró conveniente abordarla en fases, según el Ministerio.
Publicidad
Uno de los traslados lo hará un proyecto con financiación en la convocatoria europea ERC Synergy Grant. Diez millones de euros financiados por la UE. Concretamente, la propuesta que tiene como codirector a Guillermo García-Contreras, profesor de Arqueología Medieval del departamento de Historia Medieval y Ciencias y Técnicas Historiográficas. Lo integran trabajos científicos de siete universidades.
Un estudio
El de García-Contreras será el primer estudio interregional a largo plazo sobre cómo las conquistas, las migraciones, la resiliencia de las poblaciones locales, la transferencia de conocimientos y las condiciones climáticas impulsaron la transformación ambiental en el Mediterráneo occidental. Más allá de todo el impacto científico, el origen del mismo son preguntas históricas, y por lo tanto sociales y que atañen a «nuestra propia identidad, al legado del pasado que guardan nuestros paisajes, a la memoria que encierran nuestras formas de comer, etcétera».
Publicidad
«Ahora empieza la obra, el proyecto se irá luego», añade el vicerrector que no pone aún fecha para esa mudanza. El espacio se adaptará a las necesidades de este grupo, incluyendo un taller de lavado y clasificación de material arqueológico procedente de excavaciones, zonas de trabajo para la investigación y gestión, así como áreas para reuniones internas y seminarios con investigadores invitados. Se habilitará, además, un espacio de apoyo con almacenamiento y office, y un patio de entrada que articulará la relación entre los espacios interiores y el parque de la azucarera. Todos los espacios han sido diseñados bajo criterios de adaptabilidad y reversibilidad, de forma que puedan ser reutilizados por otros grupos de investigación en el futuro, garantizando así la flexibilidad y sostenibilidad del uso académico del recinto, según informó la institución universitaria en mayo.
Por entonces el Ministerio apuntó que el plazo de ejecución está estimado en nueve meses, previendo la finalización de las obras en el ejercicio 2026.
La Universidad granadina compró en diciembre de 2021 la Azucarera de San Isidro por 2,7 millones de euros. «Gracias a los ingresos de investigación –proyectos de los diferentes programas– pudimos comprar la Azucarera, cosa que de otra manera hubiese sido imposible», ponía en valor la entonces rectora de la institución académica, la profesora Pilar Aranda. La Azucarera de San Isidro es un conjunto catalogado como BIC y considerado como uno de los 100 mejores edificios industriales de España, un espacio con un gran valor patrimonial. Desde 2023 ha abierto sus puertas a varias visitas, ha visto como una nave de nueva construcción se ha convertido en laboratorio científico y retoma algo de actividad tras años de abandono antes de ser adquirido por la UGR. El gran campus universitario sostenible da nuevos pasos en un camino que será largo.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión