En Granada
2.600 fieles asistirán a la beatificación de Conchita BarrechegurenLa Catedral de Granada acoge el acto el próximo sábado, organizado por más de 80 voluntarios. «Lo cierto es que nos hemos visto superados por las expectativas»
Conchita murió el 22 de mayo de 1927, tenía 22 primaveras. En 2014, 87 años después, salvó la vida a una niña de 16 meses ... que daban por perdida. El milagro fue reconocido el 5 de mayo de 2020 y, hace exactamente un año, el Papa Francisco abrió las puertas al siguiente capítulo de su historia. El próximo sábado, 6 de mayo, más de 2.600 fieles de toda España se reunirán en la Catedral de Granada para celebrar la beatificación de la venerable, beata y niña granadina Conchita Barrecheguren.
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«Esto es un regalo de Dios», afirma Francisco Tejerizo, misionero redentorista y vicepostulador de la Causa de Canonización de Conchita Barrecheguren y de su padre, Francisco, que al poco de morir su hija se ordenó redentorista. «Los preparativos van muy bien, todo está dispuesto para el precioso momento que viviremos juntos». La celebración del sábado cuenta con un equipo organizativo de más de 80 personas, entre voluntarios (medio centenar), la comisión diocesana y el propio grupo redentorista.
Así, el arzobispo de Granada, José María Gil Tamayo, publicó este miércoles una carta en la que decía así:«La venerable Conchita se convertirá para todos los cristianos en un modelo en quien fijarse y en intercesora a los que encomendarse en el camino de la fe».
«Lo cierto es que nos hemos visto superados por las expectativas –confiesa Tejerizo–. Hemos aumentado en dos ocasiones el número de sillas adicionales que hemos colocado en la Catedral. Sentadas habrá, por lo menos, 2.600 personas». La beatificación de Conchita Barrecheguren trae autobuses de Alicante, Salamanca, Sevilla, Madrid, Almería... y también de Jayena, Motril, Albuñol, Huétor Santillán y otros muchos municipios de la provincia.
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El esquema de la celebración es el habitual en estos casos. En primer lugar, la vigilia de oración previa será el viernes a las 20.30 horas en el santuario del Perpetuo Socorro. El sábado, a las 11.00 horas, celebración de la beatificación en la Catedral de Granada. Y al día siguiente, el domingo, la eucaristía de acción de gracias, una vez más en el Perpetuo Socorro, a las 12.00 horas. «Para esta última parte contaremos con Franciszck Stanula, Vicario General de los Misioneros Redentoristas, que viene de Roma», apunta Tejerizo.
El misioneros asegura que no esperaba asistir a la beatificación de Conchita. «Se me pidió un servicio y he recibido el regalo de poder estar, un regalo inmerecido porque no he trabajado más que otros antes que yo. Por eso lo considero un regalo para todos los redentoristas y para la diócesis de Granada», termina.
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El cuadro
Durante la beatificación de Conchita Barrecheguren se desplegará sobre el altar mayor de la Catedral el cartel oficial del acto, una hermosa pintura realizada por Luis Ruiz Rodríguez. El artista ha empleado las pocas fotografías que tenemos de la granadina para componer este retrato idealizado, en el que aparece sosteniendo en sus manos un Niño Jesús. «Es como un eco de la imagen de la Virgen con el Niño que está detrás de ella y a quien parece que quiere imitar», explica Ruiz. «Su mirada –añade– es serena, pensativa y, ante la adversidad y la enfermedad, transmite esperanza».
La imagen de Conchita centra toda la composición pictórica, situándose sobre un apoyo que evoca su residencia del carmen en el Albaicín, desde donde se divisaría la panorámica de la ciudad de Granada. Una ciudad reproducida con el realismo de sus casas y templos, como la iglesia de San Cecilio o de Santo Domingo, y donde se otea en el horizonte la línea que da paso al cielo. También se ve «el caserío del barrio del Realejo, que se difumina hacia la lejanía de la Vega, donde se funde en una luz crepuscular con el cielo».
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El cuadro de la granadina, imagen oficial de la beatificación del 6 de mayo, comenzó a pintarse en 2021, pero no se había hecho público hasta ahora. «Es una obra luminosa, limpia, de colores claros», señala el autor. Además del de Conchita, Ruiz ha elaborado otro cuadro de su padre, Francisco Barrecheguren, pensado en su origen para formar un díptico, que será colocado junto al cuadro de su hija. Todo está listo. La historia continúa.
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