'Lucas Lightyear' no se muda del centro

A las 11:30 de la mañana los alumnos de quinto, vestidos de verde, han ido llegando desde los hospitales cercanos para ir haciendo corrillos y pensando en qué hacer. También han estado presente los de segundo y tercero, cada uno vestido de una manera diferente para que nadie se confunda. Los de cuarto, encargados de escoltar a los de primero, coloreaban la calle con pelucas y sombreros rojos, camisa y pantalones de vaquero. Imitando a Woody, el cowboy de Toy Story, han hecho su aparición al grito de "útero, vagina, medicina". La avenida de Madrid se ha convertido entonces en un gran escenario en el que ha aparecido el conocido como Lucas, un alumno de cuarto de medicina ataviado como Buzz Lightyear, el otro gran personaje de Toy Story. Desde ese momento bautizado como Lucas Lightyear, se ha encargado de seguir animando a los presentes para seguir con la fiesta donde manda la tradición, en la plaza de San Lázaro, donde la Policía Local ha montado un fuerte dispositivo policial y donde los veteranos han pedido sangre de novato.

Allí, Lucas Lightyear ha dado luz verde a la tradición, y unos minutos después en el ambiente se entremezclaban olores a curry, mayonesa, ketchup y huevos. Un baño para los de primer curso, que parecían vivir con la misma alegría que dignidad.

Embadurnados con la mezcla especial de San Lucas, los de primero y el resto de sus compañeros se han dirigido a la plaza de la universidad. La estatua de Carlos V ha observado con solemnidad al okupa de este año, Lucas Lightyear, que ha pronunciado un discurso de más de veinte minutos y ha repartido regalos a todas las promociones. Al finalizar la alocución, Lucas ha volado para el deleite de los allí presentes, entre los que se encontraban multitud de curiosos y estudiantes de otras facultades como la de Derecho.

Sin multas

A pesar del refuerzo policial respecto a otros años y de la prohibición de beber en la calle, no ha habido incidencias destacables. Según fuentes de la Policía Local, aún es pronto para saber si se impondrá algún tipo de sanción, aunque todo parece indicar que no ha habido ninguna incidencia.

En el botellódromo, por su parte, pasadas las 18:30 horas había congregadas entre 300 y 400 personas.