Denuncias ciudadanas hacen aflorar 105 puestos de trabajo clandestinos en un año

Ese buzón al que tiene acceso cualquier persona a través de este enlace, ha tenido como principal efecto el hacer aflorar 105 empleos inmersos en la economía sumergida. Todos y cada uno de ellos fueron denunciados por personas anónimas y en el periodo comprendido entre agosto de 2014 y agosto de 2015, según la información proporcionada a este periódico por la Inspección de Trabajo de Granada.

Este resultado es fruto de las 232 actuaciones finalizadas por los equipos de funcionarios del citado organismo oficial a partir de la información que obtuvieron en el mencionado buzón de lucha contra el fraude. La gran ventaja que comporta este sistema frente a campañas programadas y mucho mas agresivas es el de la protección de la confidencialidad de cuantas denuncias se presenten. Incluso por parte de los trabajadores inmersos en una situación de ilegalidad, que de esta manera pueden dar a conocer la situación por la que atraviesan sin temor a represalias por parte del empresario.

Fuentes del propio Ministerio de Empleo y Seguridad Social han significado a este periódico el buen funcionamiento de este buzón, que en tan sólo dos años de existencia ha experimentado un aumento muy significativo en su uso. Buen ejemplo de ello es el caso concreto de la provincia de Granada, donde en ese periodo de tiempo el número de infracciones empresariales detectadas alcanzó las 50 y el importe de las sanciones impuestas a las mismas llegó a los 233.631 euros.

Por lo que respecta al importe de los expedientes liquidatorios a la Seguridad Social que han de afrontar las empresas con trabajadores en situación irregular o ilegal, el total ascendió a 36.819 euros. Una cantidad pequeña pero que se explica porque los inspectores que detectan una de estas situaciones tan sólo pueden reclamarle a la compañía afectada la cuota correspondiente a la jornada en la que intervinieron, aunque sospechasen que también existieron otras con anterioridad.

Efectividad

El jefe en funciones de la Inspección de Trabajo de Granada, Jesús Rodríguez, explica que el buzón de lucha contra el fraude laboral y a la Seguridad Social «es una herramienta más con que contamos pero que se ha revelado como muy efectiva». Al ser los propios ciudadanos o los trabajadores afectados los que pueden utilizarlo, conlleva un marcado carácter de concienciación social contra unas conductas que atentan contra el equilibrio del mercado de trabajo y la sostenibilidad del Estado del Bienestar.

Rodríguez añade que cualquier persona puede notificar conductas fraudulentas en el ámbito laboral para que sean objeto de análisis y si fuera necesario, investigación por la Inspección de Trabajo. «Una vez analizadas las comunicaciones, la información de que disponemos se incorpora a nuestra actividad planificada, salvo los casos en los que por su gravedad o por urgencia haya que actuar de inmediato», afirma.

En cualquier caso, la Inspección de Trabajo tiene el deber absoluto de reserva sobre la identidad del denunciante de los hechos, por lo que existe una garantía absoluta de confidencialidad por este organismo.