A 100 días de algo o de nada

Son muchas las incógnitas que aún restan por despejar y ninguna de las partes implicadas termina de certificar a boca llena que la Universiada blanca granadina será una realidad el día 4 de febrero de 2015, fecha señalada para la ceremonia de inauguración. Inversión, instalaciones, patrocinio y organización son los cuatro pilares básicos del proyecto. Y cuatro son las instituciones implicadas en su desarrollo: Ayuntamiento de Granada, Junta de Andalucía, Diputación Provincial de Granada y Universidad de Granada. Las cuatro ha hecho parte de los deberes, pero ninguna ha rellenado a día de hoy todas las preguntas del examen. En medio de todas ellas se encuentra el Comité Organizador, que depende de las decisiones que tomen sus cuatro 'jefes' para seguir adelante con el evento o renunciar directamente a todo.

Cuestionar a los representantes políticos de todas las instituciones sobre la Universiada se ha convertido en una tarea de la que casi todos prefieren rehuir. Ni Ayuntamiento ni Junta ofrecen respuestas claras. A lo sumo, declaraciones sin contundencia como las del alcalde, José Torres Hurtado, que contestó a la acusación del portavoz municipal del PSOE, Paco Cuenca, sobre las exenciones fiscales, pero no terminó de completar la frase. Cuenca dijo que el Gobierno central no contempla en sus Presupuestos Generales para 2015 exenciones fiscales para empresas que patrocinen la Universiada de Granada. Torres Hurtado respondió que el Estado incluyó las exenciones en los Presupuestos de 2013 y están garantizadas hasta julio de 2015. Sin embargo, muchas de las empresas que han mostrado su disposición a patrocinar el evento han pedido que las exenciones se prorroguen hasta 2016, es decir, un año más.

Ahí radica el principal escollo de la Universiada. Sin dinero, no habrá evento. Y sin evento todas las instituciones implicadas se enfrentan a uno de los fiascos políticos más llamativos de la historia de Granada. Nadie quiere velar ese cadáver.

Las instituciones siguen sin certificar qué se hará

Aunque el proyecto cuenta con la implicación de cuatro instituciones, la voz cantante de la Universiada 2015 la ha llevado casi siempre el Ayuntamiento de Granada por ser la ciudad que acogerá el evento, si finalmente se celebra. Por su lado, aparte del canon FISU que han ido aportando todas las administraciones en los últimos cinco años, a razón de 175.000 anuales -875.000 euros en total-, el Consistorio, según aseguró José Torres Hurtado esta misma semana, pondrá la cantidad que sea necesaria. Eso sí, no aclaró cuánto será puesto que nadie tiene claro por ahora el montante total que saldrá de las arcas públicas.

Desde la Junta de Andalucía, la Consejería de Educación, Cultura y Deporte no se ha pronunciado al respecto. El consejero, Luciano Alonso, siempre que se le ha preguntado ha respondido que Sierra Nevada, uno de los pilares deportivos de la Universiada, está preparada para acoger mañana mismo la pruebas alpinas. Desde la estación que gestiona Cetursa se han expresado siempre en el mismo camino. Las inversiones estaban hechas o se han ido concretando en los últimos años.

La Diputación Provincial de Granada también tiene claro su papel en esta tablero. El traslado de las pruebas de esquí nórdico y biatlón a Eslovaquia después de que la estación recreativa de La Ragua se cayese del proyecto, dejó a la institución provincial sin protagonismo deportivo. En cuanto a aportación dineraria, el diputado de Deportes, Francisco Rodríguez, apuntó a IDEAL que «no tiene sentido» implicar financieramente a la provincia, puesto que el legado será solo para la capital. También descartó que Turismo ejerza de patrocinador.

Por último, la Universidad, que se juega su prestigio como anfitriona, trabaja para acabar el pabellón de Fuentenueva. Y en cuanto a su aportación financiera, la política de recortes del equipo de González Lodeiro chocaría frontalmente con la necesidad de una derrama mayor.

Sin novedad en las canchas para el hockey y el patinaje

Durante unos meses, la posibilidad de que la Universiada 2015 se desprendiese también de las pruebas de los deportes de hielo sobrevoló la cabeza del proyecto. Finalmente, la solución planteada de instalar canchas portátiles junto al estadio Los Cármenes fue aceptada por la FISU. Allí se celebrarían las pruebas de patinaje sobre hielo. El pabellón Mulhacén acogería el hockey hielo. Torres Hurtado dijo el pasado martes que el proyecto para instalar dichas carpas y adecuar el pabellón se adjudicó a una empresa a cambio de cederle la explotación del recinto durante 25 años. A tres meses de la inauguración no hay novedad sobre estas instalaciones.

El pabellón Fuentenueva, propiedad de la Universidad, sigue en obras, aunque estas parece que avanzan a buen ritmo y es probable que la instalación que acogerá la competición de curling está preparada a tiempo después de una inversión de seis millones de euros. Eso sí, uno de los requisitos necesarios para acoger todo evento con formato olímpico como una Universiada es que las instalaciones realicen pruebas test previas, es decir, que acojan alguna competición que sirva como ensayo. Ni el pabellón Mulhacén, ni el Fuentenueva, ni las carpas van a acoger test y llegarán 'vírgenes' a la celebración. La Federación de Deportes de Hielo pensó en celebrar en el Mulhacén el Campeonato del Mundo de hockey hielo 2014. Al no estar listo se trasladó finalmente a Jaca.

Un 50% del presupuesto no está cubierto todavía

La celebración de la Universiada 2015, después de distintos recortes, cuenta con un presupuesto de 12 millones de euros. Parte del dinero necesario se cubrirá con el canon FISU, que asciende a 3,5 millones de euros. La propia Federación Internacional de Deporte Universitario accedió a que ese montante se destinase a los gastos que acarreará el evento. Entre otros, ahí se incluyen costes como el del cronometraje o la señal de televisión. Faltarían 8,5 millones para completar el resto, de los cuales 6 millones de euros son los que debe aportar el patrocinio privado. De no llegar este, serán las instituciones los que tengan que 'rascarse el bolsillo' y añadir más euros a los casi 900.000 que ya han aportado por el canon FISU. Si la Diputación, como aseguró Francisco Rodríguez a este periódico, no tiene previsto hacer ningún desembolso económico más, solo quedarían tres instituciones para aportar el 50% necesario para cuadrar el presupuesto. Es decir, a partes iguales, Ayuntamiento, Junta y Universidad deberían cubrir con dos millones cada una la falta de posibles patrocinios.

Las empresas quieren exenciones hasta 2016

El alcalde de Granada desveló en su última comparecencia que las empresas interesadas en colaborar como patrocinadoras de la Universiada 2015 han solicitado que se prorrogue el plazo de las exenciones fiscales un año más y se lleve hasta julio de 2016. Con esa zanahoria sí estarían dispuestas a entrar de lleno en el grupo de patrocinadores y financiar parte de los seis millones de euros que se necesitan para cubrir los 12 millones de presupuesto. Cuanto más aporten los patrocinadores, menos tendrán que soltar las administraciones públicas. A tres meses de la celebración, ningún patrocinador está confirmado. Al menos, el comité organizador no ha anunciado en los últimos días que se haya cerrado acuerdo alguno. Aquí está la llave de la celebración o no de la Universiada. Sin patrocinios es muy probable que el evento se quede en nada y que la olimpiada blanca universitaria cuente con un borrón en su palmarés de celebraciones. La prórroga de las exenciones fiscales hasta 2016 haría respirar a la organización. Cien días parecen pocos.

A tres meses de la celebración de cualquier evento deportivo de cierta relevancia, la ciudad anfitriona suele estar ya engalanada para la ocasión y luce motivos decorativos que anuncian que tal competición se va a desarrollar allí. Ocurre cuando una ciudad se prepara para celebrar unos Juegos Olímpicos. La urbe elegida se ve decorada meses años, incluso años antes, con logotipos, banderas y cartelería de todo tipo. Con los Juegos Mediterráneos ocurre un tanto de lo mismo. Los productos de mercadotecnia conmemorativos suelen poblar también los comercios. Y alguna tienda oficial vende camiseta, llaveros, tazas, calendarios y todo tipo de enseres con el logotipo. Eso en Granada, de momento, no se ve por las calles. Al margen, la organización no ha anunciado ningún concurso aún para contratar elementos vitales para celebrar el evento como el transporte de material o de deportistas, algo que suele preocupar mucho a todas las delegaciones de los países participantes.

Ni siquiera se ven banderas por la ciudad

A tres meses de la celebración de cualquier evento deportivo de cierta relevancia, la ciudad anfitriona suele estar ya engalanada para la ocasión y luce motivos decorativos que anuncian que tal competición se va a desarrollar allí. Ocurre cuando una ciudad se prepara para celebrar unos Juegos Olímpicos. La urbe elegida se ve decorada meses años, incluso años antes, con logotipos, banderas y cartelería de todo tipo. Con los Juegos Mediterráneos ocurre un tanto de lo mismo. Los productos de mercadotecnia conmemorativos suelen poblar también los comercios. Y alguna tienda oficial vende camiseta, llaveros, tazas, calendarios y todo tipo de enseres con el logotipo. Eso en Granada, de momento, no se ve por las calles. Al margen, la organización no ha anunciado ningún concurso aún para contratar elementos vitales para celebrar el evento como el transporte de material o de deportistas, algo que suele preocupar mucho a todas las delegaciones de los países participantes.