Alarma de parto a los 77 años

Inmediatamente todos los servicios de emergencia se pusieron en marcha para auxiliar a la mujer y a su hijo que, teóricamente, precisaba ayuda. Los más alejados, los bomberos de Motril, tuvieron que hacer 80 kilómetros para llegar a su destino. Cuando todos se dieron cita en la entrada de la casa indicada, varios números de la Guardia Civil tocaron en la puerta y dijeron quien eran. Al momento salió una mujer muy alarmada y asustada llamada Teresa Cortés que tiene 77 años de edad y que, cómo es lógico, no estaba preñada. En ese instante todos se dieron cuenta, indignados, que había sido una broma de mal gusto, incluso, hasta delictiva.

Teresa Cortes ha manifestado que cuando a media noche comenzó a escuchar voces le dio mucho miedo. «Me creía que era gente mala que venía a robarme. Luego, cuando supe que era la Guardia Civil la que llamaba abrí la puerta. En mi casa se encontraba mi nieta Eva y sus hijos. Deberían de dar con la persona que ha hecho esto. A mí me preguntaron que si en mi casa había una mujer que se llamaba Gloria, que estaba pariendo. Y yo le dije que no había ninguna Gloria en mi casa».

Teresa, una viuda enferma, que ha trabajado toda su vida limpiando la Caja de Ahorros, el Ayuntamiento, la consulta del médico y hasta el cuartel de la Guardia Civil, dice no merecer el susto que le dieron a ella y su familia pues «sólo queremos vivir tranquilos y honradamente».

El juez de paz y ex alcalde de Murtas, Antonio Valverde, manifestó que «esta clase de bromas no deberían hacerse. Lo sucedido en Murtas habría que investigarse a fondo. Otro día ocurre algo de verdad y se lo piensan dos veces antes de venir a auxiliarnos», afirmó.