Una granadina deposita su voto ante la mirada de su mascota. Alfredo Aguilar

Crónica de ambiente del 28M

Domingo de perros

La jornada electoral transcurre con «absoluta normalidad» y sin ninguna incidencia reseñable hasta el momento

Domingo, 28 de mayo 2023, 13:27

Emilia asegura que es «su primera vez». Esta menuda jubilada reconoce que está «nerviosa» por ver cómo lo va a hacer. «No se votan todos ... los días... A ver cómo sale...». No se refiere a ella, claro; que ha visto comicios de sobra. Habla de su perrita, Kora, un cachorro de cocker spaniel café que juguetea a sus pies en la puerta de Genil y atrae más miradas y arrumacos que un candidato en campaña. «Es pequeño todavía y no quería dejarlo solo en casa, que muerde. Además, así va a aprendiendo de esto...», dice entre risas, con guasa.

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Es un domingo de perros. Es domingo de compromisarios nerviosos y desconfiados, de vocales con sueño y la boca abierta como una bocina tras celebrar el ascenso del Graná hasta la madrugada, de señores que votan temprano, con dos periódicos bajo el brazo, porque «no hay que esperar cola y así puedo ir a comer con mi hija», pero también de perros. Cinco que coinciden en Fígares con sus dueños, uno de los cuales bromea con «sellar» el voto con la pata de su caniche «porque va a valer lo mismo, nada».

Los canes están de moda. Antes los candidatos besaban bebés y se fotografiaban con chiquillos. Ahora lo 'cool' es abrazar caniches y posar con un podenco de la tierra. Por eso no extraña ver este domingo más chuchos que niños en los colegios electorales.

En San José, los había a primera hora. También votantes, que es de lo que va la cosa ciertamente. En el colegio, las cinco urnas se constituyen con normalidad, muy temprano. Todos, presidentes y vocales, han llegado antes de la hora. «Y ya había diez esperando para echar el voto...», cuenta un testigo.

En Genil, además de Emilia y Kora, votan decenas y decenas de mayores a las 10 de la mañana. El chorreo es continuo. Un compromisario de un partido protesta por que un vocal de una mesa de otro colegio lleva una chapa de una candidatura y enseña la foto y es verdad. Por lo demás, el ambiente es festivo, agradable.

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La llegada de los candidatos rompe la calma. Ocurre en el Cerrillo, en el Albaicín, en Fígares, en Cervantes, en el Zaidín... Aplausos, señores y señoras que besan a los líderes y reconocen haberles votado, periodistas y fotógrafos aleteando como abejorros. Elecciones.

En la oficina de Hacienda, junto al mercado de San Agustín, la calma la rompe un concierto de Semana Santa. Los sonidos, además de la temperatura, favorecen este viaje a una primavera pasada. Un chaval aparece para votar con la camiseta del Granada y un papelón de churros «pa' celebrar». A su lado, la presidenta de la mesa bromea con otro votante por el carnet, que lleva prácticamente roto. «¿Pero esto te funciona, chiquillo?», pregunta entre carcajadas.

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Normalidad y buen humor. Son las claves que da también la Subdelegación del Gobierno, que sobre las 13 horas informa a IDEAL que todo transcurre «bien» y «sin incidencias reseñables». Cómo apuntan, «todas las mesas estaban constituidas a las 9:02». Coincide con lo expresado también por el alcalde, que asegura que las 282 mesas de los 210 colegios de la capital están abiertas sin problemas.

Es el broche de mediodía a un domingo bellísimo, festivo, de Kora y Emilia, de un Granada en Primera, de señores que van a comer con sus hijas y de Enrique, que para redondear este domingo de perros, acompaña con dos años a su padre al colegio de la Presentación a votar «al alcalde de la patrulla Canina». «El de la serie de dibujitos animados», detalla orgulloso el progenitor.

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