La OCU sentencia: la mejor pasta para comer

Desde la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) explican que hay muchísimos tipos diferentes de pasta y destacan cuáles son las principales características de cada uno de ellos. De este modo, los consumidores podrán saber qué tipo es el que más se ajusta a sus necesidades y poder elegir sin dudar entre pasta seca, con huevo, integral, con verduras, negra, sin gluten o de arroz.

La presencia de huevo en esta variedad es de tres unidades por cada kilo de sémola, lo que da a la pasta un color amarillo intenso y una textura más fuerte. Esta pasta es «más rica en proteínas y grasa» que la pasta seca. Eso sí, el precio también es más elevado, en torno al doble con respecto a la pasta normal.

El interés de este tipo de pasta reside en su aporte de fibra, de unos 8 gramos por una ración de 70 gramos. Las de marca blanca tienen un precio en torno a los 2 euros, duplicándose en el caso de las primeras marcas. Es importante mirar que en la lista de ingredientes figura «sémola integral de trigo duro» y no sémola por un lado y salvado de trigo por otro.

Esta pasta es una mezcla de verduras y sémola, por lo que no es exactamente lo mismo que comer verdura directamente. Por cada 70 gramos de pasta, unos 37 son de verduras. Y aunque se puede encontrar más barata en los formatos de marca blanca, algunas marcas suben el precio de este producto por encima de los 5 o 6 euros.

Se trata de una pasta teñida que utiliza la tinta de calamar para tener color negro. Se trata de un producto gourmet con un precio elevado de hasta 10 euros el kilo. Sin embargo, el aporte de tinta no tiene ninguna influencia en la composición nutricional del producto.

Es una pasta fina, larga y semitransparente que se suele elaborar con harina de arroz. Con ella se elaboran fideos de arroz o noodles y su precio es mucho más caro que el de la pasta tradicional, en torno a los 10 euros el kilo.