Un profesional en una instalación de Greening Group, una de las empresas. Ideal
Innovación

La UGR abre su I+D+i a todas las empresas

Alianza público-privada ·

La Universidad granadina, que aumenta cada año su colaboración con las empresas, firmó en 2023 más de 600 contratos de investigación por valor de doce millones de euros con pymes

Andrea G. Parra

Granada

Domingo, 26 de mayo 2024, 23:07

Las empresas y las tres letras claves: I+D+I. Investigación, desarrollo e innovación. Son mucho los sectores que al preguntarles sobre planes de futuro ... aluden a la innovación. La palabra investigación se empezó a introducir –que no es lo mismo que implantar– hace tiempo. El camino de la aplicación tanto de la investigación como de la innovación es dispar en las pymes y grandes compañías. Hay negocios pequeños que han nacido de la propia investigación, otros que tienen departamentos de I+D+I y otros que creen que es difícil colaborar con la Universidad. Anoten el nombre de la Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación (OTRI) de la Universidad de Granada (UGR).

Publicidad

La institución universitaria granadina dispone de diferentes herramientas para poder trabajar con el tejido empresarial. Los datos de contratos de I+D+i suscritos por la entidad universitaria durante 2023 (contratos celebrados al amparo del art. 60 de la LOSU) superan los seiscientos. La cuantía ha superado los doce millones de euros. Están, estas estadísticas, en una tendencia alcista.

Cerca del 50% de estos contratos los realizan con empresas de la provincia. Cifras que evidencian en palabras de Carlos Sampedro, director de Transferencia e Innovación, de la entidad académica, el papel como «motor y socio estratégico» de la Universidad para el desarrollo económico de la provincia. En ese listado podemos encontrar ejemplos tan diversos como Greening Group, que comenzó como una spin-off hace poco más de una década y ya cotiza en Bolsa; Soluciones Ambientales Granada S.L., otra spin-off de reciente creación; Destina Genomics, spin-off de la Universidad de Edimburgo, afincada en Granada; Grupo La Caña o Torres Morente son otros de los muchos ejemplos.

La Oficina de Transferencia de Resultados de Investigación de la Universidad de Granada es el servicio responsable de dinamizar, promover y establecer estos acuerdos, acompañando tanto al personal docente e investigador (PDI) como a las empresas involucradas. El artículo 60 de la Ley Orgánica del Sistema Universitario establece la posibilidad de que las universidades puedan celebrar contratos con empresas y otras instituciones. El objeto de estos contratos, que se realizan a petición de las empresas e instituciones, es el de atender necesidades de las mismas en ámbitos relacionados con la investigación, asesoría, prestación de servicios y formación específica. Junto con estos acuerdos, realizan otros de transferencia de conocimiento relacionados con derechos asociados a tecnología desarrollada por la Universidad (software, bases de datos, tecnología patentada, secretos industriales, derechos de autor…) así como acuerdos de consorcio, de confidencialidad o de transferencia de material, entre muchos otros.

Publicidad

La Universidad es un «motor y socio estratégico» para el desarrollo económico

Así, junto con la colaboración en I+D+I o la adquisición de tecnología, también facilita el acceso a infraestructuras y personal técnico especializado, de forma que las empresas pueden aprovechar todo el potencial de la Universidad. Las empresas granadinas tienen la opción de acceder a los equipos y máquinas de la Universidad granadina de lo más punteras. Como son aparatos para resonancias, telescopios, supercomputadores o una microsonda iónica son solo la punta del iceberg de los muchos servicios y aparataje.

Una de las últimas adquisiciones, por parte del Centro de Instrumentación Científica, ha sido la bioimpresora BIOX6, que facilita la creación precisa de modelos tridimensionales de tejidos biológicos, abriendo nuevas puertas en campos como la ingeniería de tejidos, la medicina regenerativa y la farmacología. Las empresas de estos sectores pueden cerrar acuerdos con la UGR. Lo mismo que pueden hacerlo en análisis de estructuras, sistemas electrónicos, experimentación animal o acústica, entre otros.

Publicidad

En el caso de Greening Relive, la colaboración para desarrollar nuevos procesos en el reciclado de paneles solares comenzó en 2021 y, junto con el convenio inicial, se han firmado tres nuevos acuerdos, que contribuirán a que esta empresa ponga en marcha un proceso innovador y de cero emisiones. Lo harán, según explican desde la UGR, con tecnología propia, que contribuirá a la sostenibilidad y el reciclaje en el sector energético.

La vía de las empresas de base tecnológica también ha tenido interesante resultados. Lo han hecho tanto a iniciativa del personal investigador de la Universidad granadina como en colaboración con otras empresas. Es una línea de trabajo en la que la institución universitaria granadina también se encuentra entre las universidades españolas más activas.

Publicidad

Desde 2001, han sido impulsadas desde la entidad académica 130 empresas de base tecnológica. 62 tienen actividad actualmente. Realizan su actividad en sectores muy diversos, desde las ciencias de la salud y la vida hasta tecnologías de la información, aspectos sociales o jurídicos, entre otros.

Impacto industrial

La formación de recursos humanos está siendo otra de las acciones que están fomentando. En este orden, la Universidad granadina promueve doctorados industriales en los que trabajadores de empresas realizan su tesis doctoral en líneas de investigación de interés para sus empleadores en colaboración con la institución, líneas de investigación que también se pueden desarrollar por personal contratado por la propia institución académica a través de la cofinanciación de contratos predoctorales dentro de su plan propio de investigación y transferencia. Es una manera más apostar por la transferencia del conocimiento y que beneficia a las empresas de manera directa mejorando sus productos y servicios.

Publicidad

Colaborar en I+D+i con la Universidad tiene «numerosas ventajas», reivindica Sampedro. En primer lugar, según relata, trabajan con investigadores de primer nivel, que en muchos casos son pioneros en su campo y tienen acceso a instalaciones únicas en su entorno. Además, trabajando con la Universidad es posible acceder a financiación para el desarrollo de estos proyectos, como los de colaboración público-privada del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. Finalmente, y no menos importante, en todo el proceso cuentan con el asesoramiento técnico del personal de la OTRI sobre aspectos legales, derechos de propiedad industrial e intelectual, planes de desarrollo u optimización de presupuestos.

¿Cómo funciona?

El empresario que esté interesado en firmar un convenio con la Universidad granadina debe seguir unos pasos. Una guía de ocho puntos que no debe saltarse. Si una empresa está interesada en colaborar con la UGR en tareas de I+D+I, la forma habitual de trabajar comienza con un primer contacto, a través de los foros y reuniones en los que participa la UGR o a través de las entidades colaboradoras, como la Cámara de Comercio, la Confederación de Empresarios o la Fundación PTS, entre otras vías de acceso.

Noticia Patrocinada

Con la información aportada por la empresa, buscan uno o varios equipos de investigadores de la UGR que puedan desarrollar el proyecto y la Universidad acompaña tanto a los investigadores como a la empresa, en la elaboración de la propuesta de contrato, negociando sus condiciones para conseguir acuerdos ventajosos para ambas partes.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad