Una Vuelta a medio gas de un mermado Carlos Rodríguez
El corredor de Almuñécar arrancó limitado la ronda y se desinfló en las últimas etapas tras una notable remontada durante la segunda semana de competición
La Vuelta a España supuso un suplicio para Carlos Rodríguez. El corredor de Almuñécar acabó el Tour de Francia a mediados de julio exhausto y ... con problemas físicos. Regresó a Granada para recuperar fuerzas de cara a la ronda española, que tendría lugar menos de un mes después. Un plazo que no fue suficiente para que el de INEOS Grenadiers sacara todo su potencial.
Publicidad
«No estuve bien al inicio de la Vuelta. Acabé el Tour enfermo y arrastrándome, por lo que a la hora de volver a competir no me sentía como siempre. Llegué justo de preparación, pero estoy contento», confesó Rodríguez nada más cruzar la meta de la crono final en Madrid. El sexitano se mostró satisfecho con su décima plaza en la general a pesar de haber peleado por los puestos de arriba durante la segunda mitad de la competición. Incluso llegó a enfundarse el maillot blanco de mejor joven, un título que se llevó el danés Mattias Skjelmose en las últimas etapas.
Para el recuerdo de los aficionados quedó el gran papel de Rodríguez en las subidas a los Lagos de Covadonga y al Alto de Hazallanas en la carrera hacia Granada con salida en Motril. Fuertes ascensos que resistió el granadino para mantenerse entre los grandes del ciclismo mundial.
«El nivel de la Vuelta ha sido muy alto. Por eso estoy satisfecho con mi rendimiento. Intento salir con mentalidad positiva, pero no me conformo. Tengo ambición y quiero que este torneo me sirva en el futuro. No siempre las cosas salen como se quiere. Daré el máximo la próxima. Por mí y por el equipo», terminó.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión