David Valero vuelve a unos Juegos con el sueño de subir al podio como en Tokio

El bronce logrado en 2021 no sació la ambición de David Valero, que vuelve a soñar con estar entre los mejores al punto de sacrificar buena parte de su temporada a sus 35 años con tal de asegurar la clasificación para París y llegar allí lo más fresco posible. No será el único español en competición al acompañarle Jofre Cullel, que saldrá más adelante, desde la duodécima plaza, inmerso en uno de los mejores momentos de su carrera deportiva a sus 25 años al finalizar las dos últimas carreras de la Copa del Mundo entre los diez primeros. Ya sabe lo que es competir en unos Juegos, acabando decimoquinto en Tokio.

El circuito fue ya reconocido por David Valero, que además pudo probar con anterioridad el prototipo nuevo de bicicleta que su equipo BH Coloma ha diseñado para adecuarla al máximo a su diseño, cargado de saltos, baches, peraltes y zonas poco naturales. El bastetano lo compara al del Mundial de Glasgow y cree que, por sus características propias como corredor, puede adaptarse bien al requerir de mucha fuerza y potencia en una carrera que puede hacerse larga a muchos rivales, pero no a él, experto en esos esfuerzos de largo aliento.

Durante su última entrevista con IDEAL, desde la concentración en Altea (Alicante) previa a viajar hacia París, David Valero reconocía que haber pasado desapercibido durante la temporada podía beneficiarle en los Juegos. «Fui en progresión pensando en dar el máximo en París, sacrificando carreras por la carga de trabajo para llegar al 100%. Ahora veo que a poco que levanto el pie, las cosas me salen y me encuentro bien. Estaba todo bastante controlado y está saliendo como quería. Espero que no haya contratiempos en unos días en París. Nos lo jugamos todo a la baza de los Juegos y creo que era lo adecuado. Todo mi equipo me dio las facilidades para programarlo así, tranquilo, sin preocuparme por los resultados», justificó.

David Valero eleva entre los favoritos al oro al británico Tom Pidcock o al suizo Nino Schurter, pero cree que cualquiera del 'top-20' en el que no se incluye tendrá opciones por la gran igualdad que viene teniendo la Copa del Mundo. «Cualquiera puede liarla, y más en unos Juegos», resumió. El bastetano sí tendrá en París la compañía de su esposa Sandra y de su hijo Marco, que le faltaron en Tokio aunque supusieran su principal motivación en la distancia. A ellos espera brindarles otra medalla, consciente de que será difícil repetir en los Juegos de Los Ángeles en 2028 tras haberse estrenado en Río de Janeiro en 2016.