El ala-pívot estudioso de la psique humana
Javi Hernández ·
Tras dejar a un lado el baloncesto profesional, el granadino milita en el Tu Super La Zubia, donde ejerce además como psicólogo del clubViernes, 7 de enero 2022, 14:40
Hay ocasiones en la vida en las que, por lo que sea, se deben tomar decisiones cruciales. Por ahí pasó en verano Javi Hernández cuando, ... tras una década como profesional de la canasta, decidió dar un paso a un lado para centrarse en su otra pasión: la psicología. Un área que le «tira mucho y, dado que el panorama en el baloncesto no mejoraba, pensé que era el momento adecuado», reconoce.
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El que fuera jugador del Covirán Granada así como de Ávila, La Roda o Almansa entre otros, curado de espantos por las condiciones de las competiciones nacionales, reconoce irónicamente haber acabado «un poquito» harto, «quedándome corto», de la vida profesional baloncestística. A sus 28 años, al ala-pívot de 203 centímetros de altura –se define a sí mismo como un tipo «inquieto»–, no le ha pillado de sorpresa su nueva profesión. Y no solo por estar formado, sino porque, aclara, «llevaba años haciendo trabajo extra aparte de jugar». Fue hace unos meses cuando decidió volcarse en su profesión, «baloncesto mediante o no».
Divulgación
Hernández, en definitiva, fue preparando el terreno. Desarrolló su página web y lanzó un podcast ('Psych&Roll') para divulgar temas relevantes en la psicología deportiva. «Buscaba formas de trabajar en las que el baloncesto no fuera un impedimento», matiza. Ahora, crece a través de lo sembrado y ya ejerce a nivel individual con varios deportistas profesionales. Y aunque es evidente que su disciplina está de moda, cree que hay que tener paciencia. «Hay cada vez más gente perdiendo el miedo a hablar de sus problemas, más allá de cómo juegan o si tienen lesiones, y eso está muy bien, pero el cambio viene abajo y un club no contrata un psicólogo porque Ricky Rubio hable de ello», asegura.
El granadino, para el que las redes sociales son una herramienta clave, añade que la gente «ya va sabiendo que es importante» y que ahora toca «estar preparados con trabajo, que es lo que nos da el respeto y no lo que se diga en Twitter».
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Doble papel
Mientras, en el CBLa Zubia ha encontrado la posibilidad de llevar a cabo su doble faceta. Juega un papel importante en el equipo de Liga EBA al tiempo que ejerce como psicólogo de la entidad. «Es una posición que llevaba tiempo buscando, un club donde pudiera trabajar sin estar encorsetado», agradece.
La opción surge después de tomar su gran decisión el pasado verano. «Llevaba colaborando un par de años con David Cárdenas –presidente del club– para temas de cursos de la Federación Andaluza– y por ello fue una decisión natural», entiende, pues «era la opción perfecta para poder afianzarme como psicólogo desde Granada» y por «estar con gente que conocía de toda la vida».
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Sobre su labor en los metropolitanos, dice estar «de momento muy centrado en la figura de los entrenadores, por donde es básico empezar». Su objetivo con ellos es «añadirles dos ojos más» y reforzarles con «herramientas de comunicación, lenguaje corporal y trabajo de motivación, para después tocar también sus necesidades individuales». Hernández subraya además que «la mejor forma de atacar una zona también tiene una parte psicológica». Por todo ello, su trabajo con los entrenadores es amplio. Además, poco a poco ha ido haciendo lo propio con jugadores y en 2022 llegarán «talleres a padres, lo cual es una parte fundamental», recalca.
En todo caso, asegura estar «contento» en La Zubia «porque no se ven malos hábitos a veces instaurados en el baloncesto, por gente que piensa que si no grita, las cosas no llegan». El granadino ve un gran problema ahí. «Hay entrenadores de cantera que se emocionan cuando ven un vídeo viral de una bronca de Zeljko Obradovic o Pablo Laso y se piensan que deben aplicar eso en su equipo cuando solo conocen una pequeña parte del contexto en el que se produce ese vídeo», puntualiza. Además, destaca una frase recientemente leída al técnico serbio. «Obradovic se toma la libertad de gritarles porque asegura que cuando el jugador le pida algo va a poder darle respuestas», evoca. Algo que, obviamente, no está al alcance de todo el mundo.
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Ascenso
Por último, en lo estrictamente deportivo, el Tu Super La Zubia vive un buen momento. Líder del grupo D-A de la Liga EBA, aspira a repetir su histórica presencia de hace unos meses en la fase de ascenso a LEBPlata. «Al fin hemos encontrado la continuidad», asegura Hernández, tras tres victorias seguidas de los de Álex Capote –tercer técnico en el curso–.
El inicio de temporada no fue fácil. Ni por los cambios en el banquillo –«aunque fueran mellizos, todo entrenador tiene sus particularidades», aclara Hernández– ni por la adaptación del granadino, quien reconoce que le «costó bastante entrar». Ahí de nuevo emerge la psique en la conversación. «Venía de varios años donde el baloncesto me generaba más problemas emocionales que otra cosa por vivirlo con mucha intensidad, por lo que empecé sin jugar bien y mi cabeza me pedía cosas que nadie me exigía, hasta que me dije 'ahora que puedes disfrutar, no empieces otra vez con ese bucle de mierda'», relata. Acto seguido, dice tener ya la «estabilidad emocional» al tiempo que haber aprendido a jugar «con los que parten el bacalao, que son Eloy Almazán y 'Didi' García».
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Así que la integración en los zubienses parece un hecho. «Llevo varios partidos más tranquilo, disfrutando», apunta un tipo sincero y autocrítico que sabe que en Liga EBA tiene «que hacer más daño en la zona, y olvidar algunos automatismos que tenía en Plata, donde mi amenaza ofensiva casi solo era desde el triple».
Sobre la temporada metropolitana, es optimista. «Con nuestro nivel defensivo es difícil perder la solidez», avisa. No tanto con que el baloncesto vuelva a ser su trabajo principal. «Tendría que ser en un proyecto que abarcara el plano de la psicología, lo que le añade dificultad», cierra. Será ala-pívot aún muchos años, pero ya no dejará la psicología.
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