La segunda unidad, al rescate
LEB ORO ·
Pablo Pin valora la actuación coral del Covirán y la labor de los jugadores «sobre los que no están tanto los focos»Miércoles, 12 de mayo 2021, 01:11
En el Covirán hay cuatro jugadores básicos o titulares indiscutibles. El tiempo en la pista así como su presencia en el quinteto inicial lo confirman. ... Se trata del base Lluís Costa, el alero anotador Thomas Bropleh y los pívots Alex Murphy y Bamba Fall, todavía en vías de encontrar el mejor estado de forma posible tras la lesión de tobillo.
Publicidad
El quinto hombre en el parqué desde el principio es variable. En el primer tramo de la temporada, la liga regular, el puesto fue ocupado con frecuencia por Manu Rodríguez, que actuaba como escolta o alero bajo en la posición de 'dos'. Luego, Pablo Pin, el entrenador del Covirán, alternó con Joan Pardina y el capitán Alejandro Bortolussi en 'cincos' de salida con más centímetros y refuerzo para el rebote. A continuación, la baja de Fall y el alto rendimiento de otros jugadores de banquillo provocó alternancia en la titularidad. Salió entonces David Iriarte como 'center' y también lo hizo Germán Martínez, era el premio a la gran campaña que realiza. Esto ha ocurrido en las últimas jornadas de la segunda fase. En otras ocasiones lo ha hecho, asimismo, el base Christian Díaz. Al 'pollito' Pin recurrió en los momentos importantes de los partidos, en los últimos minutos, con la fórmula de dos bases y hasta cuatro 'bajitos', en un tándem Costa/Díaz amenazante para el aro rival, que combina el orden y la coherencia del juego del catalán con la improvisación, el atrevimiento y el riesgo valiente del canario.
Rotación de lujo
Pablo Pin cada día lo tiene más difícil para repartir los 200 minutos del partido entre sus jugadores. La incorporación de Edu Gatell resulta muy valiosa. El pívot cumple siempre y responde incluso por encima del nivel que se esperaba. En el último encuentro, contra el Valladolid en el Palacio, el técnico nazarí apostó por el mexicano Moisés Andriassi. El 'chico maravilla' también merecía tener su momento de gloria y que las cámaras recayeran sobre su presencia.
De hecho, la segunda unidad fue la que salió al rescate del Covirán en el último choque contra los pucelanos, que se inició en desventaja. La remontada llegó gracias a la labor siempre callada pero rentable de los hombres del banquillo. Pin no se cansa de valorar el esfuerzo de los que menos juegan, su disciplina, la capacidad para asumir roles menores o papeles no tan destacados. «Aplaudo a mis jugadores sobre los que no se fijan tanto los focos», explica hasta la saciedad.
El último día la actuación coral, el trabajo colectivo, dio frutos más que nunca. Ya no solo por la solidaridad en defensa sino también por el reparto en la anotación. Hasta cinco jugadores superaron la barrera de los diez puntos. Participaron once hombres en el triunfo sobre el Valladolid, con la excepción del pívot argentino Gonzalo Bressan, que está centrado en la fase de ascenso a Plata del CB La Zubia, y el lesionado Joan Pardina.
Publicidad
Así es que el Covirán se fue a los 116 de valoración, por solo 75 de su rival. La diferencia en el marcador fue de cinco puntos (90-85), pero la distancia del juego en equipo mucho mayor.
Germán Matínez sumó 13 de valoración, más que Murphy (10), cerca de Bropleh y Fall (16). Registró 11 puntos y tres triples cruciales para destrozar la defensa 'triángulo y dos' de Hugo López. Los seis rebotes y tres tapones de Gatell fueron oro puro. Bortolussi coló dos triples en ocho minutos, Iriarte, intangibles... todos se sienten integrados y útiles en un Covirán humilde pero poderoso a través del equilibrio.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión