La revolución se inicia con Pablo Laso

El cuadro alavés pasará varios días concentrado en la provincia malagueña, donde acto seguido disputará el clásico Torneo Costa del Sol ante el Unicaja y el Mónaco, cita tradicional para los equipos que dirige su entrenador, Pablo Laso, quien durante sus etapas en el Real Madrid y el Bayern de Múnich lleva años participando en dicho evento. Es precisamente la llegada del vitoriano al club de Zurbano la principal novedad en un plantel que, por lo demás, ha conseguido retener a dos piezas cruciales del curso anterior pese a los múltiples cantos de sirena que han llegado desde equipos de la Euroliga: el base Markus Howard y el ala-pívot 'Chima' Moneke.

Junto a ellos, solo cuatro jugadores más continúan del irregular ejercicio pasado, en el que el Baskonia logró disputar el 'playoff' de la Euroliga pero decepcionó en España, quedándose fuera de la Copa del Rey y de las eliminatorias por el título: Sander Raieste, Tadas Sedekerskis, Nikos Rogkavopoulos y Khalifa Diop. Además, regresa de su cesión al Zunder Palencia el prometedor Ousmane Ndiaye.

Cinco son los fichajes de una plantilla que, en todo caso, no parece cerrada aún. Cuatro en el juego exterior ―Kamar Baldwin (Trento), Ognjen Jaramaz (Partizan), Trent Forrest (Atlanta Hawks) y Timothé Luwawu-Cabarrot (Asvel Villeurbanne)― y, de momento, solo uno en la pintura: Donta Hall, procedente del Mónaco.

El gran fichaje, en todo caso, se llama Pablo Laso. El hijo del maestro Pepe, el hombre de los 22 títulos con el Real Madrid, el chico que dio sus primeros pasos en el Colegio San Viator. Puro corazón vitoriano para recuperar la magia de un equipo que lleva años poniendo todos sus huevos en la cesta de la Euroliga y olvidándose de la competición doméstica. Algo que difícilmente sucederá en esta nueva etapa.