El Covirán se arma de paciencia para encontrar un '4' que cierre la plantilla

Sin embargo, el integrante que falta por firmar a Óscar Fernández-Arenas y Pablo Pin no es ni mucho menos uno poco relevante. Se trata de un jugador interior, preferiblemente un ala-pívot, que se anhela que tenga buena amenaza exterior, para 'abrir el campo', como se dice en argot, y generar espacio a interiores más resolutivos en la pintura como Jacob Wiley, Rubén Guerrero o Iván Aurrecoechea. Un papel en el que también estarán Pere Tomàs o Edgar Vicedo, que también tendrán que jugar minutos como '4' y aprovechar su buen lanzamiento exterior para condicionar las defensas rivales. Cabe esperar así del último fichaje rojinegro que sea una de las piezas claves del ataque del Covirán.

Es por ello que, desde el Zaidín saben que tienen que afinar el tiro. Parece evidente que el plantel hasta el momento es superior al del año pasado a estas alturas en el aspecto defensivo –la gran tara de los de Pin durante muchos momentos del curso pasado–, pero en el club quieren redondear la plantilla con un jugador que suponga una notable amenaza en ataque, con talento en el uno contra uno y buena mano en el perímetro. Ese es el perfil anhelado.

Con todo, no es fácil encontrar mirlos blancos de ese calado. El potencial de algunas ligas emergentes en Asia está dificultando el mercado y subiendo el 'kilo' de pívot de calidad. Por eso, en el Covirán trabajan con paciencia, conscientes de que falta un mes para que empiece el trabajo, y con el ánimo de dar en el clavo.

Germán, a Torrelavega

Por otro lado, el Alega Cantabria de la Primera FEB–antigua LEBOro– anunció el fichaje del base-escolta Germán Martínez. El canterano rojinegro retorna así a la segunda categoría nacional, en busca de sentirse más importante después de un curso de aprendizaje pero complicado en lo personal, en el que, en su estreno en la Liga Endesa, disputó 17 partidos, con más de ocho minutos de media sobre la cancha y promediando de 2'3 puntos por choque.