Unicaja Costa de Almería, a convertir el Moisés Ruiz en un fortín

El receptor alicantino ha pasado de no jugar en Teruel a hacer dos bloqueos a Melilla y a irse a los seis puntos frente a Palma, con tres bloqueos y tres ataques. «Al partido que jugamos con Melilla llegábamos un poco justos de plazos y es por eso que decidimos el ser más conservadores que nunca en ese sentido, y el otro día ya tuve un poquito de más volumen en Palma, porque al final esa es un poco la progresión». En las mentes del staff médico del club y de jugador está «la parte de cicatrización del desgarro y, a partir de ahí, seguir apretando, pero yo dentro de lo que cabe estoy bien».

Continuar

El avance de Jiménez le anima a seguir por ese camino. «Las acciones que estoy teniendo en el entrenamiento son buenas, así que creemos que voy a llegar pronto a las mejores condiciones». No va a ser frente a UPV Léleman Conqueridor, porque aún es pronto, pero todo se suple con un plus de motivación. «Siempre es especial, es un equipo en este caso de mi comunidad, de Valencia, que ahora mismo está muy fuerte, está haciendo grandes actuaciones en estos partidos y estoy seguro de que va a ser un partido muy competido, de tú a tú». Su deseo es «ofrecer un gran espectáculo» a la afición.

Respecto a esa potencial de grada, el Moisés Ruiz debe ser un fortín. «Se ve que el nivel de la Liga ha crecido muchísimo, cada punto en cada cancha es oro y más cuando juegas en casa, así que es súper importante el hecho de jugar con nuestra afición, que nos da ese plus para puntuar, porque sabemos que cualquier equipo en su pista puede complicar las cosas, entonces en nuestro pabellón el objetivo tiene que ser sacar el mayor número de puntos posible». Clave, disfrutar de la comunión con ese público fiel. «Tanto el equipo como la afición colaboramos en un buen espectáculo y vamos de la mano».

Haciendo afición

El ejemplo no ha tardado en llegar, puesto que el primero en casa fue «de los que verdad que hacen afición», ya que, indudablemente, «la gente disfrutó mucho con nosotros, como nosotros lo estábamos haciendo con ellos», asumiendo que «es el camino a seguir». No es sólo eso, sino que el rendimiento colectivo va creciendo. «Poco a poco estamos jugando mejor, a pesar de que al principio estábamos un poquito condicionados por la situación, si bien la mayoría de nosotros nos conocemos y las piezas nuevas están encajando a la perfección, así que, obviamente, no hemos tocado techo y sigue la progresión».

Charly Jiménez, que reconoció que «a Marcos –Dreyer– le tengo un cariño especial, es un amigo», confía en la juventud que se ha incorporado a la plantilla, de la que por ahora ha tenido más protagonismo Aleix Tarrazo, que parece haber llegado a la Superliga echando la puerta abajo. «No me esperaba para nada tener tantos minutos en la pista, por lo que estoy súper contento, entrenando a tope, y quiero seguir con esos minutos que me ofrece el entrenador». Nada más llegar, titular en toda una Supercopa. «Fue impresionante, la verdad, y cuando me lo dijo el entrenador no me lo creía, me quedé flipando».

Valiente

El central barcelonés está hecho de la pasta de los valientes. «Lo intenté afrontar de la mejor manera y creo que me salió bien, dentro de lo que cabe haber perdido». Al talento y la disciplina, que de ambos ingredientes va sobrado, sólo le falta añadir ese desparpajo para alcanzar las metas, sin olvidar la 'humildad ambiciosa'. «Es lo que siempre digo, que este primer año tengo que ser una esponja y el año que viene ya intentaré quitarles el sitio –sonrisa–, pero es que son dos centrales impresionantes, Borja y Jorge, con mucha experiencia, increíbles jugando y unos grandes compañeros».

Tarrazo ha comprendido la oportunidad que se le abre, «estoy súper contento de estar detrás de ellos y aprender un montón», reconoció, sumando a esa ecuación del éxito a su entrenador. «Las sensaciones con Pablo son muy buenas, es un entrenador que me está ayudando un montón, cualquier duda que tengo me la resuelve o cualquier problema que me surge lo soluciona, así que estoy súper contento con él y considero que no he podido parar en el mejor sitio que aquí». Con esa actitud, equilibrio de muchas cosas, Aleix va a seguir avanzando en la temporada de su debut, consolidándose más al máximo nivel».

Demostración

Una demostración más la hizo en Son Moix, tras un tiempo de Pablo Ruiz con 19-16 en contra. Se logró el cambio de saque y apareció. «Cuando él me dijo de entrar, tenía claro lo que tenía que hacer, que era meter el saque e intentar meterlo con la mayor dificultad posible y creo que lo conseguí, conseguí meter el saque, sí, pero creo que con esa dificultad, y eso inquietó un poco a Palma y conseguimos llevarnos el set». También ese mítico escenario sirvió para confirmarle la complicación de cada rival. «Pensaba que iba a ser más desigualada, pero la SVM me ha sorprendido un montón».

Sobre ello abundaba algo más. «Está siendo muy igualada, cada partido es diferente, con rivales más fuertes aún… es increíble esta Superliga». Delante ahora está UPV Léleman. «Es un equipo contra el que ya hemos jugado, sabemos que es muy fuerte, pero le podemos ganar y más en casa, con nuestra afición». Poco le hace falta para definir a la grada. «Impresionante; a mí ya me dijeron que aquí en Almería había un gran ambiente, pero no me imaginaba que tanto, y se disfruta incluso estando en el banquillo». Tarrazo vuela alto y no piensa tomar tierra.