A teatro lleno se ha representado en la tarde del domingo la ópera de Gaetano Donizetti 'L'elixir d'amore', un 'malodramma iocoso', como fue ... calificado por su autor, obra que además constituye uno de los pilares de la ópera italiana con una música y un libreto que entremezclan sabiamente la comicidad y el sentimiento. Un juego de sensaciones que lleva al espectador a sentir emociones y también sonreír o reír ante el desarrollo de la trama.
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Ha sido una brillante apuesta de Juventudes Musicales de Granada y el resultado no ha podido ser mejor. Con una dirección escénica interesante y muy original, Tete Cobo ha sabido adentrarnos en la historia que se contaba. La música bellísima de Donizetti hacía que se pudiera vibrar con los avatares vividos por los protagonistas. Para ello se ha contado con un excelente Coro de la Ópera de Granada, bien dirigido por Pablo Guerrero, con el Coro Infantil de JJMM, que dirige Pedro Hernández, y una orquesta, la Filarmonía, que ha estado a muy buen nivel bajo la dirección de Alessandro Palumbo.
Juan de Dios Mato ha dado vida a Nemorino. Es un tenor joven pero precedido ya de justa fama. Tiene una bonita voz de tenor ligero y ha dotado a su personaje de todas las virtudes y defectos que la trama le asigna. Ha sabido mantener una buena vis cómica y ha estado excelente en los momentos más líricos, donde se manifiesta su amor por Adina. La famosa aria 'Una furtiva lacrima' la ha cantado de forma excepcional, con un buen gusto, una exquisita musicalidad y demostrando la calidad de su hermosa voz.
Sofía Esparza es una rutilante soprano. Voz media hermosísima, agudos brillantes llenos de musicalidad, sabiendo estar en escena y demostrando la enorme calidad que tiene. Soprano de buena coloratura, soprano que se entrega totalmente, que hace creíble a su personaje, que sabe estar desdeñosa y apasionada. Ha sido la suya una excelente actuación.
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A muy buen nivel el granadino Pablo Gálvez que ha sustituido al anteriormente anunciado. Voz bonita, robusta, musical. Formidable en su trabajo escénico, ha conseguido hacer un fanfarrón Belcore de gran nivel. Y con él también ha brillado el bajo Diego Savini que ha incorporado impecablemente al truhán y falso doctor Dulcamara. En su breve papel, muy convincente la granadina Teresa Villena.
En definitiva, una versión de altísima calidad, una versión de una gran categoría donde todos han colaborado, y de qué manera, a ponerse al servicio de la música, de la gran música, de uno de los títulos más aceptados y representados en las temporadas de ópera. El nivel, y no exagero, ha estado a la altura de la calidad de la música y del libreto. Enhorabuena a la valentía y amor por la música demostrado una vez más por JJMM de Granada.
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