Nolasco, Rancapino Chico, Pastora Galván y la compañía Arte Ácrata, en el IX Festival Cazorla Flamenca

En el pasado, este evento salpicaba todos los fines de semana de agosto, consiguiendo que, durante el mes turístico por excelencia de la canícula en el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas, se respirara flamenco por los cuatro costados en el municipio que es la punta la punta de lanza de este enclave. Sin embargo, en las últimas dos ediciones se ha comprimido el programa para que tan solo ocupe los días de un fin de semana largo, al modo del BluesCazorla. Un festival evidentemente muy distinto a este en cuanto al público al que se dirige y en cuanto a su naturaleza organizativa, sin actividades fuera del escenario principal y que, para el espectador o espectadora es de pago en todo caso.

Sea como fuere, el 'Cazorla Flamenca' se desarrollará entre el jueves 24 y el domingo 27 de agosto, con cuatro espectáculos programados. Y la apertura correrá a cargo de la compañía cazorleña Arte Ácrata y su obra titulada 'Aprieto», protagonizada por la bailaora cazorleña Elisa Musán, que estará acompañada sobre el escenario por Andrea Heredia al baile, José Romero 'Torro' a la guitarra y Alba Martos al cante. Juntas, desgranarán sobre las tablas el sufrimiento de demasiadas mujeres durante demasiado tiempo. Como ellas mismas aseguran, son «muchos tormentos y una vida, la vida de una mujer o de ciento de ellas»; y ahora -nos cuentan- intentarán «convertir su dolor en arte y encontrar así un poco de justicia para esa mujer, para esas mujeres».

El viernes será el turno de Rancapino Chico, representante de una de las nuevas generaciones del cante jondo, desde el prisma del flamenco más puro y tradicional. Hijo de una leyenda del flamenco como fue Rancapino, ha sabido respetar la memoria de esta gran dinastía añadiendo su sello personal. Flamenco puro elevado a arte por una voz privilegiada con la que llega a donde otros no pueden, exhibiendo una riqueza de matices que evoca a los más grandes.

El baile protagonizará la noche del sábado con una estrella como Pastora Galván, que repite en este festival nueve años después. Y, para describir su poderío, que mejor que rememorar lo que entonces se dijo de ella. Hija de José Galván y Eugenia de los Reyes y hermana del excelso Israel Galván se la ve venir a cada paso, en cada expresión, en cada giro. Como diría el poeta cazorleño José Luis Ríos, «el arabesco de sus manos, palomas locas de aleteos incesantes». Todo el arte exprimido sin guardar nada, sin dejarse nada para otro escenario, con la pasión más racial pero sin dejar de lado la perfección en cada movimiento.

Y, para finalizar, el domingo cantará Nolasco, que presentará aquí su nuevo disco, estrenado en marzo, 'Petricor'. Un trabajo –noveno de su carrera- que, según dicen, resume todas las cualidades de un artista único en la etapa madura de su carrera. Con una trayectoria trufada de éxitos, forjados gracias a su indudable conexión con el gran público. Ello, gracias al crisol de estilos que abarca, desde el pop al folk pasando por el flamenco o la música electrónica. Un buen modo de poner el punto y final al IX 'Cazorla Flamenca'.