'La casa más pequeña', teatro social para los más pequeños en Cazorla
El montaje, de la compañía vasca Yarleku Teatro, recibió en manos de su actriz Eva Azpelikueta, el Premio FETEN a la mejor interpretación femenina
José Luis González
Cazorla
Viernes, 15 de noviembre 2024, 21:03
Lástima que el Teatro de la Merced estuviera medio lleno, o medio vacío, según se mire. En este mundo tan 'bonito' que el ser humano ... a nivel global se están dejando, el teatro con sensibilidad social para el público más pequeño podría ser una tabla de salvación para las generaciones futuras, quienes habrán de arreglar –si aún pueden– este entuerto. Montajes como 'La casa más pequeña', de la compañía vasca Yarleku Teatro, se dirigen en esa dirección. Con dos formidables actrices, Laura Villanueva y Eva Azpilikueta, esta última merecedora por esta papel del Premio FETEN 2019 a la mejor interpretación femenina, un texto marcado por la sensibilidad de Maialen Día, una dirección acorde a ese libreto de Rosa Díaz y una escenografía sencilla, sin ningún elemento al azar y muy en la tónica del conjunto.
La historia que cuenta es la de dos niñas cualquiera en una guerra cualquiera, da igual dónde ni cuándo. Perdidas en un mundo que no comprenden, sin casa y sin familia; sin hogar. Habitando una tierra quemada y marcada por el hambre, la sinrazón y la violencia. En la que, sin embargo, aún mantienen ese impulso infantil e incomprensible para los adultos que es el de jugar, saltar y reírse junto a otros niños y niñas incluso en las peores circunstancias posibles.
No hay más que leer cualquier periódico o poner la televisión para observar con inmensa tristeza –quien aún guarde la sensibilidad para sentirla fuera de su entorno más íntimo- cómo en Ucrania o Gaza, y otros lugares menos 'mediáticos', decenas de miles de niños y niñas son masacrados o transformados en personas refugiadas, arrancadas de sus familias por las bombas que ordenan dejar caer señores con traje y corbata desde sus cálidos y lujosos despachos. Componiendo historias desgarradoras de penuria, aun encontrado esa rendija de luz en la oscuridad que la infancia encuentra las más de las veces.
Campo de refugiados
De eso trata 'La casa más pequeña', de una niña de ocho años llamada Bettina (Eva Azpilikueta), que llega cargada de equipaje a un campo de refugiados. Sola y desamparada sin saber qué ha sido de su hogar y su familia. Una niña, como tantas, juguetona, alegre y soñadora. Sus padres consiguieron sacarla de debajo de las bombas cuando el entorno del Puente de las Mil Luces comenzó a temblar y las casas «lloraban cristales rotos». En un pequeño espacio que encuentra para establecerse temporalmente, encuentra a Norma (Laura Villanueva), otra niña en sus mismas circunstancias. Ambas construyen una tierna amistad, entre el hambre y los peligros que acechan afuera de ese pequeño fortín que construyen juntas.
En definitiva, una oportunidad perdida para los niños y niñas, y su padres y madres, que prefirieron quedarse en casa la tarde-noche en la que Teatrino debía llenar su imaginación y sus vidas.
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