La historia de Granada en un boceto de hace 140 años

Pongamos el foco en este último, 'La rendición de Granada', que fue copiado en 1882 por Diego Marín y que se puede observar en dimensiones reducidas en el pasillo de la alcaldía del Ayuntamiento –también hay otra réplica en la Lonja de la Capilla Real–. Francisco Pradilla acudió a la propia Capilla Real para realizar un estudio pormenorizado, en forma de acuarela, del Guion Real de Isabel la Católica, también llamado de 'las flechas' porque contiene flechas, y el del ReyFernando, conocido como el de 'los yugos'. Ambos símbolos juntos significan la unión, aunque el de Fernando lleva el lema 'tanto monta, monta tanto'. El de Isabel también incorpora la banda cruzada, la Banda de Castilla, distintivo que indicaba a las tropas la presencia de la Católica y que la acompañaba en viajes y ceremonias.

El cuadro de Pradilla, un óleo sobre lienzo con unas dimensiones de 330 por 550 centímetros, reconstruye ese momento en que Boabdil entrega las llaves de la ciudad en 1492 a los Reyes Católicos, un pasaje que representa la unificación de España. Lo hace plasmando todos los detalles que fue consultando de fuentes directas, en este caso en Granada: las caras de los Reyes, el color de los caballos, la visión de la Alhambra, la vestimenta de los caballeros... todo tal cual se cree que sucedió según la historiografía. Y todo esto es noticia ahora, en enero de 2021, porque Ansorena subastará el próximo día 26 el boceto del pendón que realizó Pradilla para 'La rendición de Granada'. Se trata del lote numerado con el 656 y el precio de salida es de novecientos euros. Instituciones como la Sociedad Española de Vexilología –disciplina que se dedica al estudio de las banderas– considera que esta obra es de grandísimo interés.

Habrá que esperar unas cuantas semanas para saber quién será el nuevo propietario. La puja se puede llevar a cabo de una manera presencial, en las instalaciones de Ansorena, en la calle Alcalá, pero también a través de internet o teléfono. Esa tasación de novecientos euros de partida la realizan los propios asesores de la casa y lo normal es que siempre sea más baja que su valor real. «Subirá mucho o poco en función de la demanda (estamos hablando de criterios de mercado puro y duro)», explica el coleccionista Íñigo Pérez de Rada. Una vez fijado el coste final para el comprador, éste tendrá que abonar un veintiún por ciento más en concepto de corretaje e impuestos, mientras que al vendedor, cuya identidad se desconoce, se le detraerá un veinte por ciento por diferentes gastos como los de publicación en catálogo –Ansorena los cuida mucho las publicaciones y las edita tanto en papel como on line–.

Las enseñas reproducidas por Pradilla fueron donadas por los Reyes Católicos a la Capilla Real.La Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico las restauró en 2019. Poseen indudables valores vinculados a su uso y significado, además de ser elementos museísticos de primer orden dentro de la colección de los objetos personales de los Reyes Católicos. «Las actuaciones de conservación han supuesto un importante avance en su conocimiento tanto desde el punto de vista material y técnico como histórico y artístico, al ser la primera vez que se aborda su examen desde una metodología científica», destacó en su día la consejera Patricia del Pozo.

Los distintivos están realizados en seda con brocado carmesí y los escudos pintados con pan de oro. Las alteraciones más acusadas que presentaban eran acumulación de polvo en toda la superficie, roturas y deformaciones del tejido, así como pérdidas de soporte y cromatismo.

Más allá de los análisis de laboratorio, el propio Francisco Pradilla realizó una serie de anotaciones en el bosquejo que ahora pone a la venta Ansorena. Se aprecian a simple vista. En las líneas principales se lee: «Pendón de los Reyes Católicos cuando la Rendición de Granada / estudio para mi cuadro / Granada 1879 / F. Pradilla». De forma adicional se indica «damasco a flores / pintado con oro y plata / terciopelo, oro y sedas».

Según el propio Senado, 'La rendición de Granada' es «la joya más preciada de la colección artística que se guarda en el palacio». «También la más espectacular y asombrosa –agregan– que Pradilla llevó a cabo dentro del género durante el siglo XIX». «Su extraordinaria fama, sustentada sobre todo en su fastuosidad escenográfica y en la minuciosidad descriptiva y en la constante utilización de su imagen para los más diversos fines, hacen que este cuadro trascienda ampliamente la plasticidad de su autor», señalan desde el Senado.

Pradilla recibió el encargo del Senado para realizar 'La rendición de Granada' a través de su presidente, el marqués de Barzanallana, que dirigió una carta a Pradilla el 17 de agosto de 1878, unas semanas después del resonado triunfo que había obtenido Pradilla con 'Doña Juana la Loca' en la ExposiciónNacional de ese año, donde recibió la Medalla de Honor. 'La rendición de Granada', «punto de partida para los grandes hechos realizados por nuestros abuelos bajo aquellos gloriosos soberanos», como especificaba Barzanallana en su misiva, iba destinado a la sala de conferencias del Senado, que a lo largo de esos años sería ornamentada con esculturas y pinturas protagonizadas por grandes personajes de la Historia de España, en un conjunto iconográfico destinado a exaltar la gloria nacional.

Pradilla empezó a pintar en Granada, aunque la elaboración final y la conclusión fue en Roma, ciudad desde la que realizó el envío hasta el Senado, un transporte fechado el 13 de junio de 1882 acompañado de una epístola donde Pradilla hace una pormenorizada descripción de su propia creación. «Mi composición es un segmento de semicírculo que el ejército cristiano forma desplegado, paralelo a la carretera», explica. «En planta –prosigue– supongo que están situados los caballeros, teniendo o guardando en medio a las damas de la Reina;ésta, el Rey y sus dos hijos mayores están situados delante y en el centro del radio, con los pajes y reyes de armas a los lados». «El Rey Chico avanza por el camino a caballo hasta la presencia de los Reyes, haciendo ademán de apearse y pronunciando la sabida frase (llora como mujer lo que no supiste defender como hombre)», redacta el artista.

Francisco Pradilla y Ortiz, que nació en Villanueva de Gállego (Zaragoza) en 1848, fue un extraordinario pintor, pero también ocupó la dirección de prestigiosas instituciones como la Real Academia de España en Roma y del propio Museo del Prado. Se trasladó a Madrid en 1863, donde estudió a los antiguos maestros. 'La rendición de Granada', fechado en 1882, destaca por la limpieza de la caracterización, la viveza de la representación y la grandeza de estilo.Ganó el primer premio en una exposición en Múnich (Alemania) en el año 1893.