Los guionistas del futuro, en el valle de Lecrín
Una decena de autores participa en la segunda edición del Scriptnest,bajo la tutela de maestros como Benito Zambrano o Patricia Ortega
El último trecho del camino hasta el Molino de Lecrín, en Dúrcal, es pedregoso y feraz, como es la carrera del guionista. En este paraje ... se respira la calma que precede a la tormenta. En este caso, la tormenta creativa, que es la que los participantes del laboratorio creativo Scriptnest desarrollan hasta el próximo día 22 en este rincón de Granada. La idea, según la cineasta Inés Nofuentes, creadora de este 'invento' que este año alcanza su segunda edición, es alejar del mundanal ruido –en estos tiempos de redes y postureo, el ruido es mucho– a un grupo de creadores con presente –todos ellos embarcados en proyectos y con una importante trayectoria detrás– y futuro, para dar un empujón a sus criaturas audiovisuales, y bajo la tutela de autores con la experiencia de Benito Zambrano, Patricia Ortega, Diego Cañizal, Salvador Perpiñá, Tacho González o Arturo Cid, entre otros. Con la particularidad, además, de que los participantes en el laboratorio han venido, en algunos casos, acompañados de sus familias, completando una atmósfera bucólica digna del 'Beatus ille'.
Publicidad
Nofuentes asegura que el laboratorio nació de una realidad: la que viven las guionistas que, tras ser madres, se ven obligadas a 'parar' en su labor creativa. «En la industria del audiovisual, todo va muy rápido, y cuando te haces a un lado, te es difícil retomar el ritmo», afirma. «Fue entonces cuando pensamos en la necesidad de muchos de estos profesionales de aislarse durante unos días, sin tener que preocuparse de nada, sólo de pensar y de escribir». Al final, el objetivo es crear una comunidad de cuidado mutuo y colaboración, huyendo de las capitales o los grandes focos, donde la vida de los guionistas, como la de todos, va, quizá, demasiado deprisa. «Es una necesidad tanto creativa como vital», señala.
La primera experiencia, el año pasado, trajo hasta Dúrcal a profesionales procedentes de varios países, como Polonia, Grecia o Colombia, una realidad que se ha repetido este año. Este año hay profesionales que desarrollan su labor en el Reino Unido, Colombia y España. Los géneros en que trabajan estos profesionales son muy diversos, desde el documental al largometraje o las series de acción, y vienen a Granada con un proyecto concreto en el que durante los diez días que dura el taller, avanzarán.
En una de las cabañas del complejo, está Benito Zambrano –director de 'Solas', 'Pan de limón con semillas de amapola' o 'Intemperie', entre otros títulos–, manteniendo una charla con el gallego Jacobo Lagüela, español afincado en el Reino Unido, donde ejerce como director de fotografía. Su primer largometraje, 'Julia', se estrenará en salas el 14 de septiembre. «Hay que dar mucho espacio a la creación, porque en las buenas películas, lo importante es lo que se quiere contar», destaca Zambrano. «Es necesario abrir espacios como este, porque en la vida profesional es necesario que te escuchen con una cierta mirada. Solo contar tu idea en voz alta ya te ayuda a calibrar su importancia», destaca. Sobre el 'ruidoso' entorno del que se mueve actualmente la producción audiovisual, asegura que la profesión de guionista «supone, en cierta medida, armar ese ruido. Somos parte de un negocio en crecimiento, pero también es necesario, en ocasiones, tener una cierta calma para escuchar y escucharse, pensar hacia dentro, no hacia afuera. Cada formato, cada medio, tiene sus tiempos. En el caso de una película, precisa de reposo, porque tiene un recorrido distinto desde el punto de vista cognitivo. En el caso de los proyectos que han venido a este laboratorio, hay muchos largometrajes, por lo que sus artífices deben ser conscientes de esta realidad».
Publicidad
Ciertamente, el crecimiento exponencial de la ficción seriada ha acelerado los tiempos. «Si aumenta el nivel de producción, aumenta el de fabricación de historias. Yo mismo estoy trabajando en varios proyectos de series, y si mantenemos este nivel de consumo en que el espectador puede ver una producción de siete capítulos en dos días, no sé cómo vamos a ser capaces de inventar tanto...», dice entre risas.
En el equipo también está la realizadora venezolana Patricia Ortega, quien este año ha estrenado su obra 'Mamacruz' en el Festival de Sundance, rodada en Sevilla, y la cual forma parte del programa de la Seminci, o Diego Cañizal, jienense de origen y afincado en Colombia, hoy por hoy uno de los más prestigiosos consultores de guion y proyectos audiovisuales de Hispanoamérica. Su película 'El Piedra' ha entrado en el catálogo de la todopoderosa HBO en Estados Unidos. «Esto está siendo muy divertido, hay propuestas muy 'juguetonas' y a la vez, con planteamientos muy serios. Hay mucho talento, y el talento es el combustible de la creación», asegura.
Publicidad
Una de las profesionales que está disfrutando del laboratorio es la script y futura directora malagueña afincada en Cantabria, Marta M. Mata, quien ha sido la script de la serie 'Las noches de Tefía', estrenada este verano por Atresmedia. Califica el ambiente como «fantástico». Está desarrollando un proyecto como directora en torno a una institución de ayuda a las madres órfilas, es decir, aquellas que han perdido un hijo o una hija. «El proyecto ya tiene concedidas varias ayudas que lo pueden hacer viable, y estoy aquí para afinar el guion», afirma.
Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión