Un año completo de Carlos Cano

En este mismo sentido, para final de año o para la próxima primavera, verá la luz un 'Cancionero de Carlos Cano' (aún inexistente en el mercado), publicado por Altolibros Editorial, que recogerá toda la obra del cantautor.

La Universidad de Granada a su vez se ha sumado a este 75 aniversario exponiendo, en el Palacio del Almirante, la muestra 'Manos de Santa: utensilios de repostería conventual en el Albayzín y el Realejo' que, como su nombre indica, revela los enseres característicos de las cocinas de los conventos granadinos. El visitante que acuda a esta exposición podrá adentrarse en un convento de clausura, donde un torno original del siglo XVI le da la bienvenida. La exposición recrea una alacena, una cocina y el despacho de dulces donde se conjugan algunas de las singularidades, herramientas y utensilios culinarios conventuales que desde hace siglos forman parte de la vida conventual cotidiana. Por otro lado la exposición rinde homenaje a la canción 'Alacena de las monjas' que Carlos Cano grabó por vez primera en el disco 'Quédate con la copla', en 1978.

Otra de las novedades para este aniversario ha sido la presentación del libro 'Carlos Cano. Voces para una Biografía', del periodista Omar Jurado y el fotógrafo Juan Miguel Morales que editaron en colaboración Carlos Cano Producciones y la Diputación de Granada. En sus más de trescientas páginas, el volumen recoge los testimonios de familiares, amigos y activistas sociales y políticos que lo conocieron y que compartieron su intensa trayectoria o que sienten la influencia de su obra absolutamente viva y cercana, entre los que destacan, aparte de su mujer, Alicia Sánchez, y de su hija, Amaranta Cano, Juan de Loxa, Paco Ibáñez, Luis Pastor, Lluís Llach, Manuel Gerena, Santiago Auserón, Antonio Burgos, Ian Gibson, Antonio Gala, Martirio o Pasión Vega. En total más de 50 personalidades que van tejiendo, con sus voces escritas y ordenadas de manera cronológica, según relatan, la vida y obra del trovador granadino.

Omar Jurado, coautor del libro, declara: «Escuchar a Carlos Cano es un deleite y un gozo para los amantes de las buenas coplas ('No es canción, se llama copla'; cantaba él), de las buenas letras, de las canciones con mensaje y con afán de denuncia. Pero lo que realmente hace trascender a Carlos Cano es su personalidad, rebelde, como él mismo se definía. Rebelde ante las injusticias de cualquier clase y en cualquier ámbito. Carlos Cano es una inspiración para la vida, por su autenticidad, su compromiso, su integridad y su coherencia. Saber que hay personas como Carlos Cano me hace sentir feliz y esperanzado. Me reconcilia con este mundo con el que, últimamente, ando un poco a la greña». Los textos van acompañados por la reproducción de las inolvidables canciones que Carlos Cano nos dejó para siempre y por una selección de instantáneas tomadas por Juan Miguel Morales, tanto del cantautor como de su entorno para ilustrar cada uno de los textos.

Para este otoño de 2021, el libro antedicho conformará una exposición que, bajo el mismo título: 'Carlos Cano. Voces para una biografía', programarán en conjunto el Ayuntamiento y la Universidad de Granada.

La más reciente de las actuaciones relacionadas ha sido el descubrimiento de una placa homenaje en la casa natal de Carlos Cano, en el número 17 de la Cuesta Rodrigo del Campo del Realejo, inaugurada el 19 de marzo. Fue un sencillo homenaje, al que acudió su hija Amaranta Cano en representación de la familia, que impulsó el Ayuntamiento en colaboración con la Diputación y la Universidad con el objetivo de reivindicar el legado del artista y conformar a la larga un recorrido Carlos Cano por sus lugares más emblemáticos en la ciudad.

Para ello también se cuenta con la remodelación de la Plaza Carlos Cano por parte del Consistorio, como lugar de la memoria. Para Amaranta —en el acto antedicho—, a su padre hay que evocarlo «a través de su música y su poesía, en cada trozo de esos paisajes y a veces de los sugerentes olores y sonidos que regala esta ciudad», donde sin embargo hay pocas señalizaciones a su memoria, más allá de las mencionadas y una placa que recuerda el pregón que ofreció en 1992, junto a Enrique Morente y a iniciativa de los vecinos del Realejo, por el quinto centenario del barrio.

Para el alcalde de Granada, Luis Salvador, este acto (y todos los que se celebrarán en el marco de lo que han dado en llamar el 'Año Carlos Cano') supuso una forma de «comenzar a saldar una pequeña deuda de reconocimiento» de Granada con uno de sus hijos predilectos.

Por último, siempre por el empeño de la familia, su mujer y sus dos hijas, al frente de una Productora y una Asociación Memoria Carlos Cano, hay en perspectiva algunos otros proyectos, como son la edición de guías didácticas para que la figura de Carlos Cano entre en las aulas; una exposición retrospectiva sobre su figura para un futuro cercano; ciertos actos reivindicativos con la plataforma Granada Abierta, como son las colaboraciones en la fiesta local 'Mariana Pineda' o en 'Granada por la tolerancia', el día 2 de enero'; y la intención de difundir tanto las publicaciones, como el disco y el concierto por la mayoría de lugares posibles.