Calamaro vence a la lluvia en Granada
El artista bonaerense saca adelante con actitud un concierto de menos a más, con permanentes amagos de tormenta, en el Teatro del Generalife
Eduardo Tébar
Viernes, 15 de septiembre 2023, 00:05
Las ovejitas en el cielo dieron paso a los truenos y a la lluvia a la hora de inicio del concierto. El antecedente del 'costellazo' ... un par de semanas atrás hacía presagiar lo peor. Sin embargo, al cabo de quince minutos, Andrés Calamaro y su tropa salieron al escenario del Generalife. Eran las diez menos cuarto de la noche de este jueves raro, de meteorología imprevisible. El argentino, vestido de negro y con gafas ahumadas, se situó al mando de su teclado en un costado. Saludó con frialdad y arrancó por la vía de un rock robusto, 'Output input', que no terminaba de calentar a la humedecida concurrencia.
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Al poco cantó 'A los ojos', de Los Rodríguez, y la cosa se fue caldeando. Luego, de nuevo unas gotas en 'Verdades afiladas'. Y al fin una tregua para disfrutar del colosal cancionero del bonaerense, que recordaba su primera actuación en esta ciudad, hace más de tres décadas. «Tengo una conciencia pura de lo que es Granada: cultura y música del siglo XX», dijo. Ahí se metió a la gente en el bolsillo. Afloraron los cánticos de «¡Andrés, Andrés!», antes de un trepidante popurrí con 'La parte de adelante', 'Loco' y 'Corte de huracán'.
La banda salió afilada con corsé roquero, con un sobresaliente Julián Kanevsky a la guitarra. La faceta latina lució cuando invitó sobre las tablas al guitarrista flamenco Niño Josele. 'Estadio azteca', 'Los aviones' y 'Para no olvidar' sonaron grandiosas. Y 'Andrelo' enamoró con su voz, que sigue llena de grietas y de baches, y derrapó de lo lindo con el poco melancólico y los mimbres ajados del repertorio.
Amago de tormenta
Calamaro se negó a acelerar las canciones para sobrevivir al amago de tormenta. Es más: acabó esparciendo su esponjosa locuacidad y la canallesca ironía. El bohemio y cantor conquistó a un auditorio repleto en su velada en el ciclo 1001 Músicas CaixaBank, con la colaboración en este espectáculo de Royal Bliss.
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Tras experiencias como la impuntualidad brutal en Fermasa por irse a ver torear a El Fandi en 2008 y enmendarlo en 2011 en la Industrial Copera, este Calamaro de 62 años dedicó 'My mafia' al tenista Carlos Alcaraz, sacó a colación con insistencia las censuras de estos tiempos y bromeó con el tema Rubiales: «En mi vida hice algo tan asqueroso como darle un piquito a un varón».
Cayeron mejor sus palabras de elogio para esta tierra: «El mejor disco de punk en España lo grabó Enrique Morente. Es un placer tocar en la tierra de 091 y Los Planetas. Las personas cultas de Argentina no me creerán cuando les diga que he actuado en la Alhambra». Fue Andrés en estado puro. El de los monólogos que avanzan haciendo eses y el de la incontinencia verbal. Un héroe ante la adversidad.
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