Susana Díaz: «Uno no va a un bar igual que el 13 de marzo pero los niños van al colegio igual o peor»

–Se habla mucho de Susana Díaz en el inicio de este curso político. ¿Eso es bueno o es malo?

–Yo espero que se hable de los problemas de los andaluces.

–Digo que se habla mucho de Susana Díaz y de su futuro...

–Lo más importante es la gente y estar a su servicio. Mi futuro, ahora mismo, no es prioritario, ya he manifestado lo que deseo, lo que quiero, para lo que tengo ilusión y para lo que espero contar con el apoyo de mis compañeros.

–También se habló de su ausencia durante el estado de alarma. [Elías Bendodo llegó a decir que llevaba un «tiempecito tumbada a la bartola»].

–Es que hice lo que algunas mujeres hacemos de vez en cuando, que es parir. No obstante, a los pocos días de dar a luz fui a San Telmo cuando me llamó el presidente de la Junta y le dije que estaba a disposición para lo que necesitara. Eso fue el 13 de marzo y no me volvió a llamar nunca durante el estado de alarma, solo una vez y no para hablarme del coronavirus sino de otras cosas.

–También se quejaba Pablo Casado de que no le llamaba Pedro Sánchez...

–Si me hubiera llamado la mismas veces que Pedro Sánchez a Pablo Casado me habrían parecido bastantes. Moreno Bonilla ni llamó a los partidos en la oposición, ni a los presidentes de las diputaciones, que tardaron seis meses en acudir a San Telmo y tuvieron que atender a los medios en la calle, ni tampoco a los ayuntamientos.

–Sí estuvo recientemente con Juanma Moreno y le ofreció colaboración para sacar adelante los presupuestos. ¿Han vuelto a hablar del tema?

–No me ha vuelto a llamar pero, de todas formas, vamos a acudir el lunes [por mañana] a la reunión con el consejero de Hacienda con la voluntad firme de que Andalucía tenga unos presupuestos que blinden el estado del bienestar y eviten lo que está pasando: la gente no puede ir al médico y se están empezando a colapsar las Urgencias porque no te atienden en los centros de salud. Unos presupuestos que generen empleo y marquen un horizonte distinto al que nos ha anunciado Moreno Bonilla. Me resisto a pensar que haya dado por hecho que habrá medio millón de parados más en Andalucía.

–¿Ese diálogo sobre el presupuesto tiene líneas rojas?

–Se las acabo de nombrar.

–¿Vox está en esas líneas rojas?

–Nuestras prioridades y objetivos no son los de la ultraderecha. La ultraderecha ha venido para otras cosas y no cree en el Estado autonómico. Estamos en las antípodas, corremos en carriles diferentes.

–Sin embargo, una negociación de presupuesto...

–(Interrumpe) Se ha visto en la fallida pantomima de la comisión de reconstrucción [presidida por Vox tras rechazar su propia constitución]. Cuando pones al lobo a cuidar de las gallinas pasan estas cosas. Votaron en contra porque no creían en ella y en ese documento [el primer dictamen] aparece que 'mientras duren las autonomías...'. Están entregando la reconstrucción de la autonomía a quien duda de su continuidad.

–Quería decir que abrir una negociación, a veces, significa sentarse con partidos más incómodos para sus propias posiciones. Lo hace el PSOE con Bildu en el Congreso.

–Estábamos sentados en esa comisión [de reconstrucción], lo que le pedimos al presidente de la Junta fue que la liderase él. Decidió entregársela a quien manda, a quien tiene la sartén por el mango y decide los tiempos, lo que se aprueba y lo que no.

–Pedro Sánchez defiende que, ante una situación excepcional, se necesita de un acuerdo presupuestario excepcional. ¿También en Andalucía? ¿Cree que tendría que producirse un acuerdo entre PP y PSOE?

–Yo lo creo, para aliviar el sufrimiento que tienen los andaluces. La impotencia de no poder ir al médico porque han decidido no reforzar la atención primaria. ¿Nosotros lo hubiéramos hecho igual? No. En lugar de contratar tres mil vigilantes de la playa habríamos reforzado los centros de salud. ¿Sabe dónde van a computar los tres mil vigilantes de la playa? En el dinero extraordinario para la crisis sanitaria. El dinero está y uno tiene que decidir dónde lo gasta. Los 384 millones que vienen a Educación tienen que servir para que haya más docentes y menos niños en las clases. Quizás ahora mismo haya más niños en las aulas que el 13 de marzo en muchos colegios en Andalucía porque se han suprimido líneas en la educación pública.

–Otro frente de debate es, precisamente, el dinero. La Junta sostiene que no llega lo que corresponde a Andalucía...

–(Corta) En algunos casos, más. En Educación vamos a recibir el 20% y somos el 18% de la población. Estos fondos no son financiación, son para solucionar un problema por una pandemia. Ese dinero es lógico que se destine a los centros de salud, los hospitales, los enfermos.... No somos capaces de saber en qué ha gastado el dinero el Gobierno de Andalucía. Han dado seis cifras diferentes. Debería decir con transparencia qué se ha gastado y en qué, y la primera que apoyaría en esa reivindicación sería yo. Están llegando recursos muy por encima en algunos casos de lo que creo que se ha invertido. Respecto a los fondos europeos, pedimos que sean por proyectos, que es lo que no quiere el Gobierno de Andalucía, porque eso te obliga a trabajar.

–Pero el problema de financiación existe.

–Y lo comparto. Y en el modelo que reivindicamos cuando estábamos nosotros, que no todos se sumaron [por Ciudadanos], vamos a estar al lado del Gobierno de Andalucía. Un andaluz tiene que recibir lo mismo que cualquier otro ciudadano del resto de España. Ahora mismo hay un déficit de financiación, desde hace años. Y creo que va haber más sensibilidad por parte del Gobierno central.

–¿Acompañará también en la reivindicación para que el objetivo de déficit sea similar al concedido al País Vasco?

–¿Renunciamos a los fondos? Uno tiene que decidir cómo se financia. El País Vasco y Navarra tienen un sistema foral, no tienen derecho a participar en el reparto del dinero que va a venir del Gobierno de España para paliar el déficit en la financiación de este año. Dinero o deuda, así de fácil. Lo mínimo que debe saber es cómo funciona un sistema de financiación. Si no lo sabe que lo aprenda, pero que no falte a la verdad y no engañe a los andaluces.

–En la vuelta al cole, ¿había medios, financiación y tiempo para haber hecho las cosas mejor?

–Sí. Lo que no ha habido por parte del Gobierno de Andalucía es ni voluntad ni ganas. Los docentes y las ampas llevaban desde marzo reivindicando la planificación. Moreno Bonilla anunció que el 15 de mayo íbamos a volver a las escuelas. No sé qué planificación tenía para ese día. Acabó el curso con 16.000 niños en Andalucía sin profesor porque no se cubrieron las bajas durante la pandemia. Un tercio de los niños se descolgaron. Les ofrecimos todos los espacios públicos de los ayuntamientos de 500 municipios. Mire hasta qué punto es surrealista que los profesores se hicieron los PCR cuando ya estaban en los centros y algunos dieron positivo.

–Usted lleva a su hijo al colegio, ¿está segura?

–Quiero la educación presencial, porque no hay nada que eduque más en igualdad que dos niños en un aula recibiendo la misma educación, pero reivindico que sea una vuelta segura.

–Pero, ¿el colegio en Andalucía es seguro?

–Es evidente que cuando todos los días se están aislando aulas, cuando hay más niños en los coles que el 13 de marzo, cuando los profesores te dicen que no y el propio presidente de la Junta ha reconocido que no es seguro... entonces, es que no lo es. Al 100% no puede serlo, pero sí mucho más seguro. Uno no va a un bar igual que iba antes del 13 de marzo. ¡Cómo van a ir los niños al colegio igual o peor que el 13 de marzo! ¿Para todo hay aforo menos para las aulas?

–Le han acusado de boicotear desde el PSOE la vuelta al cole.

–¡Fíjese! Y les hemos ofrecido 500 ayuntamientos y seis diputaciones todo los espacios públicos que tenemos a nuestro alcance. Fui a verlo con 14 medidas a su despacho. No quería escucharlo porque no habían hecho nada.

–¿Se ha tomado alguna de esas 14 medidas?

–Ninguna. Y eran cosas muy concretas. Bajar la ratio a 20, atención especial a los niños en situación vulnerable... ¿No es de sentido común que las aulas de educación especial se refuercen? No tiene sentido que al enfermero, además de los pacientes del centro de salud, le encomienden 3.300 o 4.000 niños. No le pedí que pusiera una enfermera en cada colegio, le dije que pusiera otro en cada centro de salud solo para los coles.

–Viendo la evolución de la pandemia, ¿cree que Juanma Moreno tendría que pedir ayuda al Gobierno?

–Lo primero que debería hacer es reforzar los centros de atención primaria.

–Parece que no hay médicos...

–Todos los años hay una campaña de verano y se cubren las sustituciones. El dinero estaba, que hubiesen dedicado el esfuerzo a contratar médicos en lugar de vigilantes de las playas. Dijeron que los contratos iban a ser de seis meses y no lo son, ni está garantizada la plantilla hasta el 31 de diciembre.

–¿Las medidas restrictivas las ve necesarias, suficientes…?

–No conocemos los datos. Es algo surrealista.

–Los datos se conocen.

–No es verdad, no conocemos los datos por municipios. Los alcaldes y alcaldesas están mendigando los datos en las puertas de los centros de salud.

–Hay una base de datos, se supone, que actualizada.

–No, no, en Andalucía no están dando los datos por municipios. No todos los municipios tienen la misma incidencia, ni siquiera las provincias. La transparencia es clave. Y a día de hoy no es posible; y le pedí esos datos el 1 de septiembre en la última reunión.

–Entonces, ¿los datos que hay por municipios en la web qué son?

–En Andalucía no hay datos por municipios. No es verdad.

–Hay una cifra en la web.

–Global, no por municipios. Y la excusa es que dicen que no es conveniente. Saber los datos permite que no haya bulos ni se creen alarmas innecesarias y que se puedan adoptar medidas de distancia social más firmes. Ni fue posible en marzo, que se los pedimos por activa y por pasiva, ni ahora.

–Decía esta semana el presidente de la Junta que no descarta confinamientos selectivos, como Madrid. ¿Tendría su apoyo?

–Primero que explique el porqué. Si ya se está planteando eso es que habrá datos que desconocemos. Otro problema añadido es que somos la comunidad que hace menos PCR de España. Hay mucha gente asintomática que no sabe que lo es y muchos que se llevan 15 días para que les hagan el PCR.