Los doce andaluces contagiados con el coronavirus están estables y en seguimiento en sus hogares

La Consejería de Salud y Familias ayer sí confirmó dos nuevos casos de coronavirus en el territorio andaluz, que se sumaban a los diez afectados que se habían diagnosticado hasta ese momento. Estos dos últimos contagiados son dos profesionales sanitarios de Sevilla de 28 y 36 años que tuvieron contacto con el primer paciente confirmado en Andalucía. Además, este epidemia que ya ha contagiado en España a 126 personas -dos de ellos ya están curados-, también afectó a tres personas de Fuengirola, dos hombres de 59 y 62 años y una mujer de 55 años, que habían viajado recientemente a la región italiana de Emilia-Romagna.

Los otros pacientes contagiados de coronavirus en Andalucía también evolucionan favorablemente. El primer afectado de COVID-19 en Almería es un paciente de 28 años que reside en Milán. Además, el pasado viernes se diagnosticaron tres casos en Marbella. Los afectados eran dos varones de 42 y 53 años que presentaban episodios de neumonía. El otro contagio era el de una mujer de 81 años con vinculación familiar con uno de estos pacientes.

En la provincia de Jaén, por su parte, se registró el caso de una enfermera de Arjonilla (Jaén), de 25 años, que atendió a un enfermo con el virus en el Hospital de Torrejón de Ardoz. El último caso del viernes fue el de un médico sevillano de 58 años que tuvo contacto con el primer paciente confirmado en Andalucía. Este primer afectado, un hombre de 62 años, presenta buena evolución y ya no tiene fiebre.

«Hay que intentar tener la cabeza fría porque es verdad que la situación es preocupante, pero no hay que contribuir al alarmismo porque no ayuda en nada», confesó hoy el ministro de Sanidad, Salvador Illa, tras explicar que el Gobierno contempla la posibilidad de ordenar «restricciones» relacionadas «con agrupamientos de personas» (o sea, prohibir concentraciones multitudinarias , decretar el «cierre de colegios» o recomendar el teletrabajo), al menos en los dos lugares donde se desconoce el origen de las infecciones y que se han convertido en la pesadilla de las autoridades: Torrejón de Ardoz, en Madrid, y Vitoria.

Sanidad, que hasta ayer se mostraba moderadamente satisfecha por el trabajo hecho, declara abiertamente ahora su inquietud, porque la contención de la epidemia ya no es tanta. El ritmo infectivo, que parecía a finales de la semana pasada estabilizado en la veintena de nuevos positivos diarios, ha aumentado considerablemente en las últimas horas, doblando la velocidad de contagios, con 43 positivos solo este lunes en todo el país.

Según ha explicado, Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, la buena noticia es que no estaría habiendo una gran «propagación comunitaria» (o sea contagiados de focos ya conocidos), el escenario más negativo en la lucha contra cualquier infección y no han aparecido nuevos focos de origen desconocido.

Por ello, ha insistido el máximo responsable de la lucha contra el Covid-19, España va a mantenerse en el escenario 1 («contención»), al menos a nivel general. Simón ha recordado que aumentar la alerta a la fase de «mitigación» de manera generalizada comportaría un «impacto socioeconómico muy importante», ya que, sobre todo, supone la prohibición de eventos multitudinarios.