Almería, a los Óscar con "Vivir es fácil con los ojos cerrados"

Una noticia que ha sido recibida por el director de la película en Zaragoza cuando se encontraba precisamente dando una charla con Juan Carrión, el profesor de 90 años en el que está basada la historia de "Vivir es fácil con los ojos cerrados", y que ambos han celebrado fundiéndose en un abrazo entre los aplausos de los asistentes.

La película relata el viaje que emprende el profesor (que interpreta Javier Cámara) al enterarse de que John Lennon está en Almería rodando una película, un camino en el que recoge a un chico de 16 años que se ha fugado de su casa (Francesc Colomer) y a una joven de 21 (Natalia de Molina), que también parece estar escapando de algo. Entre los tres nacerá una amistad inolvidable.

En el "largo" camino que, ha dicho Trueba, se inicia ahora y que "no ha hecho más que empezar" para optar al Óscar a la Mejor Película en habla no inglesa, se han quedado otras dos cintas que habían sido preseleccionadas por la Academia de Cine: "El Niño", de Daniel Monzón, y "10.000 kilómetros", la ópera prima de Carlos Marques-Marcet.

Dos películas que son "muy buenas", ha asegurado el director, que ha explicado que no esperaba la elección de su filme.

"Para mí, el premio ha sido haber hecho la película y todo lo que que pasa después es un regalo. Son dos cosas diferentes", ha añadido Trueba, quien ha señalado que este proceso se produce todos los años y que España no ha conseguido desde hace bastante tiempo "estar entre los nominados finales. Por tanto, hay que ser muy prudentes".

Veinte han sido hasta ahora las producciones nacionales candidatas al Óscar a Mejor Película de Habla no Inglesa, de las cuales cuatro ("Mar adentro" de Alejandro Amenábar; "Todo sobre mi madre", de Pedro Almodóvar; "Bélle Epoque", de Fernando Trueba, y "Volver a empezar", de José Luis Garci) se hicieron con la estatuilla.

En 2003, otra película de David Trueba, "Los soldados de Salamina", fue seleccionada para representar a España en esta categoría.

El acto de lectura de la película española elegida para ser candidata en la 87 edición de los Premios Óscar ha tenido lugar en la sede de la Academia de Cine en Madrid, donde se encontraba el actor protagonista de la cinta, Javier Cámara, con un ramo de rosas que había comprado de camino para regalar al ganador.

"No las teníamos todas con nosotros", ha confesado el actor, que ha entregado el ramo a una feliz Cristina Huete, la productora de la película.

Huete ha dicho que tiene muchas esperanzas en la película porque "tiene cosas que gustan" a los académicos de Hollywood: es tierna y habla de libertad y educación, ha dicho, convencida de las posibilidades de la cinta.

Tanto Huete como Cámara han insistido en que necesitan mucha ayuda en la carrera que empieza a partir de ahora para hacerse con la estatuilla.

"Estamos muy ahogados", ha asegurado Huete: "las productoras pequeñas estamos en una situación límite. Es mi caso y quiero seguir haciendo películas pero no lo tenemos fáciles si las televisiones, privadas y públicas, si el Gobierno no paga sus deudas con el cine español. Es muy grave lo que está ocurriendo".

Por ello, ha pedido al Gobierno que pague las amortizaciones al cine correspondientes a 2012 y ha recordado que en países como Francia, el Ejecutivo, "sea de izquierdas o de derechas" siempre apoya a su industria cinematográfica: "ojalá tuviéramos en este país esa suerte".

Según Javier Cámara, es curioso que "en un año tan fantástico que el Gobierno está recaudando el IVA una barbaridad y que todavía falte dinero de vuelta, es curioso, parece kafkiano".