Los Dólmenes de Gorafe: un viaje por el Neolítico y la Edad de Bronce en Granada

El proyecto del Geoparque del Norte de Granada nació con el fin de enaltecer una de las zonas con más valor histórico y geológico de Europa, dando a conocer el registro sedimentario continental más completo del Cuaternario en todo el mundo. Su riqueza geológica, paisajística y cultural hacen del norte de la provincia un lugar excepcional que merece la pena visitar.

De entre todos los municipios que forman parte de este proyecto, pertenecientes a las comarcas de Baza, Guadix, Montes Orientales y Huéscar; en esta ocasión destacamos Gorafe, una localidad ubicada al margen del río Gor, en una zona escarpada formada por conglomerados y badlands, que alberga la mayor concentración de dólmenes de toda la península y gran parte de Europa.

En total son 242 construcciones funerarias repartidas en 11 necrópolis, de tipologías muy variadas que van desde los simples enterramientos pentagonales hasta las grandes construcciones con falsa cúpula. En torno a estos dólmenes, se ha creado un parque megalítico en el que se ubica el Centro de Interpretación del Megalitismo, con tres rutas señalizadas en las que se pueden visitar los dólmenes restaurados para tal fin.

Para llegar al punto de partida desde Granada, accedemos a la A-92 en dirección Murcia/Almería. A unos 60 kilómetros, pasando Guadix, cogemos el desvío de la A-92N en dirección Baza/Murcia, donde tomaremos la salida hacia 16 (Cenascuras - Gorafe). Continuamos por la GR-6100 hasta el Mirador del Llano de Olivares durante 5 minutos, aproximadamente, hasta llegar al Parque Megalítico de Gorafe.

En este punto, encontraremos tres rutas señalizadas para visitar los distintos dólmenes del llamado «Desierto de Gorafe»: la ruta de las Hoyas de Coquín, la ruta del Llano de Olivares y la ruta de las Majadillas.

En este recorrido encontraremos dos necrópolis de la Edad de Bronce: Umbría de las Hoyas y Hoyas del Coquín Bajo. En ellas, podemos visitar 10 de los 20 dólmenes que se encuentran en este paraje. Se trata de las construcciones funerarias de mayor tamaño que encontramos en la zona, alcanzando algunas de ellas los 2,20 metros.

En la necrópolis del Llano de Olivares, podemos visitar 13 de los 23 dólmenes con los que cuenta. Se trata de construcciones pentagonales, muchas de las cuales todavía conservan las losas de cubierta. En uno de ellos se hallaron 22 esqueletos, convirtiéndose en el enterramiento más numeroso de la zona.

La ruta de las Majadillas cuenta con 23 dólmenes, de los que se han habilitado para visita un total de 14. Algunas de las construcciones ubicadas en esta necrópolis superan los cuatro metros de longitud. Es el caso del dolmen número 69, que cuenta con 4,4 metros y que destaca entre el resto de construcciones, junto con la llamada «Cobertera», de 3,4 metros de longitud.

Además de las rutas habilitadas para visitar los dólmenes, el visitante puede realizar una parada en el Centro de Interpretación Megalítico, un edificio circular de 634 metros cuadrados, en los que se distribuyen cinco salas con material arqueológico procedente de los yacimientos y una sala de proyección, donde es posible visualizar un documental en 3D que realiza un recorrido por las diferentes culturas que habitaron la zona y que analiza las técnicas utilizadas en las construcciones de los dólmenes de Gorafe.

No podemos terminar nuestra visita sin dar un paseo por el municipio de Gorafe, un pequeño pueblo de 379 habitantes dedicado a la agricultura y el turismo rural. Su nombre procede del vocablo árabe «Gaurab» (cámaras altas), haciendo referencia a las casas cueva que encontramos en este y otros municipios del norte de la provincia de Granada.

Precisamente estas construcciones son el atractivo turístico más destacado de Gorafe, que cuenta con numerosos habitáculos excavados en la montaña, heredados probablemente del poblado almohade de Los Algarves (s. XII) y ubicadas detrás del cementerio. Los lugareños suelen utilizar el término «covarrones» para referirse a estas construcciones, que destacan por su carácter defensivo y por sus diversidad de funciones (atalayas, refugios, viviendas, graneros o caballerizas) y que guardan cierta similitud con las cuevas antiguas del norte de África.

El Castillo de Gorafe es una fortificación rodeada de murallas y torres, cuyos restos poco conservados pueden observarse ampliamente desde el cerro. En su interior, encontramos una escultura contemporánea del Sagrado Corazón de Jesús.

El municipio de Gorafe cuenta con una segunda fortaleza llamada «El Cuervo» que, según los historiadores, podría tratarse del antiguo emplazamiento medieval del pueblo.

La actual parroquia del municipio de Gorafe es una edificación mudéjar del siglo XVI, cuyos restos han sido restaurados en distintas ocasiones a lo largo de la historia.

Los artículos de artesanía que se elaboran en el municipio con esparto y madera de olivo, completan el atractivo turístico de este pequeño pueblo del norte de Granada.

Desde el pasado año, Gorafe cuenta con un recurso turístico más: la Casa del Desierto. Se trata de un proyecto de la empresa Guardian Glass, consistente en una vivienda eficiente, integrada en el entorno, con un tipo de vidrio especial, capaz de soportar las temperaturas extremas que se dan en este lugar.

El alojamiento se encuentra enclavado en uno de los espacios más adversos y duros de Europa, como es el desierto de los Coloraos en Gorafe, un lugar en donde las temperaturas pueden alcanzar los 50º centígrados y descender hasta los -10º. Además, se trata de un espacio único en el que disfrutar de los famosos cielos estrellados de Gorafe.