'Al rescate' de las aldeas de Santiago-Pontones incomunicadas por la nieve

Tanto la Junta de Andalucía como el Ayuntamiento de Santiago-Pontones han intensificado los trabajos en la zona para abrir el acceso a los núcleos de población aislados por la nieve, cada uno dentro de sus competencias. Así, a las tres y media de la tarde de hoy ha concluido con éxito el operativo desplegado por la Junta de Andalucía, que ha abarcado La Muela, Marchena, Marchenica y otros núcleos de esa zona como El Cortijillo, además de Prado Moro y Miller. La nieve, los grandes bloques de hielo y las ramas y pinos caídos en los accesos debido a la intensa nevada han complicado los trabajos.

Dos tractores quitanieves, cinco motoserristas y un coordinador de operaciones han conformado el dispositivo. La delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía en Jaén, Maribel Lozano, activó anoche la situación de preemergencia en el Plan Territorial de Emergencias de Andalucía (PTAnd) en fase provincial, como consecuencia de los avisos meteorológicos por grandes nevadas en Cazorla y Segura. A partir de ese momento comenzaron las labores de rescate, que se han intensificado al amanecer debido a las condiciones orográficas y meteorológicas, tal y como ha informado la Junta de Andalucía.

A las aldeas incomunicadas hubo que sumar un corte de luz de más de quince horas que afectó a la población de Santiago de la Espada, las aldeas de la vega y parte de Pontones. ¿El motivo? La caída de varios postes de luz. La avería se arregló y el fluido eléctrico se restableció ayer a las cinco y media de la tarde, pero hasta entonces la preocupación fue máxima por la situación que pudiera presentarse en plena borrasca ya que no había ni teléfono.

De momento todas las carreteras están abiertas, según el alcalde, Pascual González, quien recomienda salir solo si es imprescindible y con mucha precaución. «Tenemos aldeas como Don Domingo o El Patronato que están cerca de los 1.600 metros de altitud, en ese sentido la nieve es bastante normal aquí, pero sí es cierto que llevábamos dos años ya que en enero no nevaba mucho o prácticamente nada. La cantidad que ha caído ahora hace tiempo que no la veíamos», concluye el alcalde.