«El futuro de Quesada pasa por potenciar la agricultura y el turismo»

Aquel día José Luis Vílchez, de 36 años, licenciado en Historia por la Universidad de Granada, secretario general de Juventudes Socialistas en el período 2014-2018, concejal de Juventud, Participación Ciudadana, y Nuevas Tecnologías entre 2015 y 2019 y primer teniente de alcalde y responsable municipal, entre otras áreas, de Obras y Caminos 2019-2021, tomó el bastón de mando para ser el sexto alcalde del municipio de Quesada en el periodo democrático.

-Tomar el relevo de un alcalde del carisma de Manuel Vallejo tiene que ser complicado.

–Manuel Vallejo, además de carismático, ha sido un alcalde hecho a sí mismo. Antes de despedirse de la política se dirigió a mí para decirme: «José Luis, solo quiero expresarte lo que un día mi madre me dijo, que hiciera cuanto estuviera en mis manos y fuera siempre honrado con mis vecinos». Atesoro su consejo, lo utilizo como guía de mis políticas y decisiones actuales y futuras.

–¿Cómo lleva estas primeras semanas al frente del Ayuntamiento?

–Marcadas por el calor, pero arropado por el cariño de mis vecinos, están siendo muy positivas. No soy un personaje desconocido y eso ayuda mucho. El pueblo me transmite una fuerza que se complementa con la misión de cerrar proyectos pendientes e iniciar otros nuevos. Espero que mis acciones estén a la altura de las necesidades y expectativas.

–En sus 6 años de vida municipal ha sido el portavoz de su grupo en el Ayuntamiento. ¿Le ha servido para curtirse dentro de la política?

–Asumir las tareas de portavoz me ha permitido comprender mejor la realidad de mi pueblo, analizar el alcance de las políticas adoptadas y, sobre todo, asumir de forma progresiva mayor responsabilidad y compromiso.

–¿Son muy diferentes los cargos de concejal y de alcalde?

–El alcalde es un concejal más de la corporación, la diferencia radica en la necesidad y capacidad de coordinar las múltiples y diversas medidas que se adoptan desde el equipo de gobierno. El alcalde ha de discernir entre lo deseable, lo necesario y lo urgente, administrando bien los recursos propios y atendiendo a las necesidades de los ciudadanos. Tengo la suerte de contar con un equipo de concejales y compañeros que facilitan la gestión.

–¿Qué necesidades prioritarias tiene Quesada?

–El futuro de Quesada pasa por seguir potenciando los sectores agrícola y turístico. Solo así se podrá proyectar una economía complementaria que permita alejar ese fantasma de la despoblación que amenaza al mundo rural. El proyecto más emblemático a emprender es acabar la travesía A-315. Me encuentro a la espera de cerrar con la Junta de Andalucía una fórmula de cooperación que permita la realización de este eje vertebral tan importante para la comunicación de la comarca de la Sierra de Cazorla, un problema vial que, actualmente a su paso por Quesada, constituye un serio peligro.

– La Diputación y el Gobierno de la Nación por una lado y Junta de Andalucía por otro son de colores diferentes. PSOE y Podemos por un lado y PP y CS por otro. ¿Qué espera de  estas administraciones?

–Sinceramente, trabajar con unos y otros como hasta ahora hemos hecho. Cada administración dirige sus políticas desde una óptica ideológica. Algunas compartiremos en mayor medida, otras en menos, pero para mí Quesada solo tiene un color y ese es el de las necesidades y demandas vecinales y por ellas trabajamos ante cualquier administración.

–¿Se ve en la Alcaldía tantos años como Vallejo?

–Como expresé en mi discurso de investidura, solo concibo la política como una herramienta al servicio de todos. Mi paso por esta Alcaldía dependerá de que el pueblo siga confiando en nuestros proyectos y en el enfoque de mi actividad en el cargo.

–Quesada es un referente en la Cultura de la provincia. Zabaleta, Miguel Hernández, Verdes, Antonio Navarrete... ¿Piensa mimar especialmente esta área?

–La Cultura juega un papel básico para posicionar a Quesada en el tablero turístico nacional. Trabajaremos para diversificar más si cabe nuestro atractivo como lugar de destino y seguir proyectando nuestro patrimonio histórico, natural y gastronómico, así como nuestros museos, las tradiciones y el rico folclore de la tierra.

–¿Cómo es el quesadeño? Dígame un lugar de Quesada para perderse.

–Los quesadeños y quesadeñas son amables, hospitalarios, sinceros, trabajadores, muy luchadores. Es un carácter que llevamos en los genes y se transmite de generación en generación. En cuanto a lugares mágicos ahí está la Cueva del Agua, Belerda con su Pilón Azul, el nacimiento del Guadalquivir o los tejos milenarios.

Menos conocidos pero también seductores resulta disfrutar de un paseo por las aldeas de Collejares y Cortijuelo a la orilla del Guadiana Menor, transitar por el casco antiguo como la calle Adentro o recrearse en los rincones poéticos adyacentes a de la plaza de la Lonja.