Casi 3.000 visitas a la cisterna romana de La Calderona en su primer mes

El alcalde de Porcuna, Miguel Moreno, ha valorado el interés que ha despertado este recuperado espacio y ello pese a que «no se ha hecho todavía una promoción fuerte porque no se daría respuesta adecuada a la demanda que existiría».

El primer edil ha señalado la intención de ampliar la estructura de la Oficina Municipal de Turismo con «más recursos humanos y materiales para poder dar respuesta a esa demanda fuerte» que se espera a partir de otoño, cuando el Ayuntamiento prevé también potenciar la promoción de La Calderona.

«Queremos que todo aquel viajero que visite Porcuna y, sobre todo, La Calderona, que es un icono de época romana ahora mismo en todo el territorio nacional e internacional, se lleve una buena impresión, que sea bien atendido y tenga una visita guiada, explicativa, amplia y en condiciones», ha explicado Moreno.

Durante el primer mes abierta al público las visitas han estado a cargo del director del proyecto arqueológico de La Calderona y director del Museo Arqueológico Municipal de Obvlco, Pablo Casado, y Fernando Salas, miembro, como el primero, del Grupo de Arqueólogos e Investigadores de la Historia de Porcuna (Arqvipo).

La Calderona es un monumento declarado Bien de Interés Cultural (BIC) cuya recuperación y puesta en valor ha supuesto una intervención de gran envergadura, en ejecución desde 2021 y con una inversión de casi 1,7 millones de euros. El Gobierno de España ha aportado el 70% del presupuesto a través del programa 1,5 por ciento Cultural; mientras que el Ayuntamiento de Porcuna ha asumido el 18% y la Diputación de Jaén el 12% restante.

El proyecto, que en su vertiente arquitectónica ha estado dirigido por Pablo Millán, ha incluido cinco grandes actuaciones, con la creación de un edificio con una rampa helicoidal para descender a la cota de la cisterna, así como la habilitación de una pasarela y puente para hacer posible la entrada al conjunto subterráneo hidráulico, aprovechando el túnel que durante la Guerra Civil española ejecutaron los zapadores del ejército para su uso como refugio antiaéreo.

Además, se ha llevado a cabo la restauración y puesta en valor de la propia cisterna, así como de los restos arqueológicos hallados en el entorno, un sector de casas romanas junto a espacios artesanales y comerciales.

Con un magnífico estado de conservación, este enclave situado en uno de los bordes del actual núcleo urbano de Porcuna da idea de la relevancia del Municipium Pontificiense de Obulco. De hecho, la antigua Ibolca, capital de los Túrdulos, fue una de las grandes urbes de la Bética romana, con 100 hectáreas amuralladas, solo superadas en el siglo II d.C. por las 120 de Córdoba.

La Calderona tuvo como función original el abastecimiento público de agua en uno de los barrios occidentales de Obulco y en ella destaca la monumentalidad constructiva, a base de bloques y losas megalíticas de piedra autóctona, y el estado intacto en que ha llegado a la actualidad.

«Esto la hace unos de los mejores monumentos arqueológicos romanos conservados de Hispania y del Mediterráneo Occidental», aseguró ante su inauguración el arqueólogo Pablo Casado, para el que su recuperación abre «nuevos horizontes y escalas en la investigación y uso público del gigantesco y singular yacimiento urbano de Porcuna y su territorio».