En ejecución la remodelación de los nichos del patio de Linarejos en el Cementerio de San José

Y es que dichos espacios funerarios, que circundan toda la parte central del camposanto municipal linarense, datan de principios del siglo XX, de ahí los arreglos que se están realizando para su consolidación, mantenimiento y conservación. Así las cosas, el proyecto contempla el saneamiento de la zona y la construcción de estructuras nuevas para los nichos, eso sí, sin llegar a modificar la estética original de los mismos por su valor patrimonial.

«Estas obras fueron impulsadas por el Ayuntamiento para una primera fase de nichos, aunque nuestra intención y la del Consistorio es que pueda arreglarse el resto de módulos porque están realmente mal. Además, sería idóneo poder hacer un aprovechamiento más adecuado de espacios para contar con nichos nuevos y ponerlos a disposición de las familias», señaló José Manuel Rodríguez, gerente de la empresa Cementerio Parque.

Desde la compañía que gestiona los servicios funerarios en la ciudad se procedió, hace meses, a contactar con las familias de los fallecidos enterrados en los nichos objetos de reforma para informar acerca de las exhumaciones y traslados provisionales de los restos a otros nichos. Así, una vez concluya la rehabilitación, los féretros volverán a ser depositados en sus respectivos espacios.

Al margen de esta intervención, Cementerio Parque también solicitó elaborar un estudio para hacer un pasillo nuevo de comunicación en el patio de San Rafael dentro del Cementerio de San José. Otro proyecto que se contempla, aunque mucho más a largo plazo, es la rehabilitación de la capilla, aunque para ello es preciso contar con la pertinente autorización de las autoridades eclesiásticas y del Ayuntamiento.

En lo que respecta a las instalaciones del popularmente conocido como cementerio 'nuevo', la empresa ejecuta mejoras que se interrumpieron durante el estado de alarma. En concreto, se trata de actuaciones encaminadas a mejorar la movilidad y la accesibilidad en el recinto funerario (nuevos aparcamientos superiores, rampas, escaleras), así como 320 nichos nuevos y áreas ajardinadas con fuentes.

Otra inversión de especial envergadura fue la adaptación del horno incinerador para cumplir la normativa medioambiental vigente. En ese sentido, se cambió la instalación del crematorio de gasoil a gas para que contamine menos, lo que supuso también una obra importante de adecuación del interior de las cámaras.

Ante la proximidad del Día de Todos los Santos, desde la gerencia de la empresa Cementerio Parque no ocultan su «preocupación» sobre qué medidas o protocolos de actuación tendrán que seguirse, atendiendo a las recomendaciones de las autoridades sanitarias por la pandemia de la Covid-19, con el fin de poder controlar aforos y distanciamiento social. «En esas fechas tan señaladas llegan a pasar 20.000 personas diarias y controlar toda esa afluencia es imposible», dijo Rodríguez.