Un premio de «justicia» para la presidenta del Supremo en Jaén

El calor asfixiante del exterior quedaba fuera de las puertas de la sala de vistas de la Audiencia Provincial de Jaén, donde ha tenido lugar una celebración con el aire acondicionado listo para acomodar a los presentes, la mayoría con doble capa, que se diría, entre el traje con americana y la toga oficial.

Junto al decano de los procuradores de Jaén, José Ramón Carrasco, se han encargado de dirigir el acto el presidente de la Audiencia, Rafael Morales; la fiscal jefe, Pilar Sánchez, y el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Todos ellos tenían una misma visión positiva sobre la importancia del papel de la procura y, además, de la entrega de la Toga de Plata en su quinta edición a la presidenta del CGPJ.

Durante sus intervenciones, se ha hecho alusión a la labor «vital» de los procuradores, en un «reflejo de la gente», como apuntaba Morales, o sobre la «honestidad y la vocación», en el que hay que dar «lo mejor de cada uno», señalaba Del Río.

Sobre la galardonada también hubo palabras de reconocimiento. Del Río valoraba su forma de ser, ya que «en tiempos de turbulencia política» lo importante es «dar valor a las instituciones que tienen problemas de credibilidad» y que «da sentido al poder judicial».

Pero, sin duda, la protagonista en esta jornada ha sido Perelló. La fiscal jefa destacaba su defensa por el poder judicial, «por la separación y el rechazo del lawfare, los insultos e intentos de socavarlo». El decano jienense de los procuradores también valoraba su extensa trayectoria profesional, así como su «puesta en valor de la vocación» y, aprovechaba la ocasión para reivindicar «más medios» para la profesión, especialmente con la aplicación de la ley de eficiencia que carga más a los procuradores. También ha hecho alusión a un «exceso de litigiosidad» que se verá reflejada en la memoria y por la que «hay que buscar una solución» de la entrada elevada de asuntos antes del 2 de abril.

El presidente del TSJA ha subrayado que «para ser un buen juez o procurador, hay que dar lo mejor de uno mismo». Ha manifestado que hay «problemas organizativos» en el poder judicial y que los jueces hacen «todo lo posible» para «llegar a buen puerto», además de «la implicación de la Junta».

La presidenta del CGPJ ha mostrado un «sincero agradecimiento» por recibir la Toga de Plata. Ha hecho referencia al importante papel de la mujer en el sector, cada vez más presente, ya que «del total de 132 nombramientos realizados por el actual Consejo General del Poder Judicial, más del 41% han recaído en candidatas mujeres».

Asimismo, ha hecho hincapié en que el procurador «es una figura de equilibrio». «Es una combinación de diversas cualidades: precisión técnica y jurídica, vocación de servicio, sentido del deber, discreción y serenidad», ha dicho, y señalaba que en muchas ocasiones «os encontráis con demoras, problemas administrativos e incidencias y, aun así, mantenéis la entereza y el compromiso con la Justicia». «Sois verdaderos profesionales al servicio de la sociedad y vuestra entrega, como la de los jueces y la de todo el personal al servicio de la Administración de Justicia, merece gratitud y respeto», subrayaba.

En el caso de Jaén, la situación de la Justicia «ha mejorado, con carácter general», en este último año. Así, según los datos de la Sección de Estadística del Consejo General del Poder Judicial, en el 2024 se dio un incremento de un 2,4% en la tasa de resolución y un incremento del 10% en el número de sentencias dictadas. «No me cabe duda de que en esa pequeña mejora de los datos, pese a la recurrente falta de medios que siempre atenaza a la Administración de Justicia en todos los ámbitos, los procuradores de Jaén habéis jugado un papel importante», ha valorado.

Por último, ha indicado que «el poder judicial está únicamente sometido al imperio de la ley, pues solo una Justicia independiente garantiza a los ciudadanos que sus derechos están protegidos frente a posibles excesos que puedan provenir de particulares o de otros poderes del Estado». «El poder judicial se diseña en la Constitución como un verdadero poder, junto al Legislativo y el Ejecutivo», afirmaba, y destacaba que «es un contrapeso a los demás poderes del Estado y, en definitiva, viene a servir de equilibrio a la sociedad democrática».