El impulso de los Municipios Turísticos

Las localidades interesadas en convertirse en Municipios Turísticos (que deben tener menos de 100.000 habitantes) deben demostrar, por ejemplo, que reciben un número de visitas cinco veces superior al de su población, que el número de pernoctaciones supera al diez por ciento de la población de la localidad o que cuentan con unos servicios públicos y una accesibilidad que faciliten las visitas.

Todos esos requisitos los cumplen actualmente solo dos municipios en la provincia: Cazorla y Baeza. El pueblo cazorleño es el más 'veterano', fue declarado Municipio Turístico en marzo de 2005, aunque cabe destacar que cada cierto tiempo los municipios tienen que demostrar que siguen mereciendo dicha catalogación.

Y es que, aunque son muchas las exigencias que tienen para conseguirla, esta denominación trae consigo un impulso económico. Los Municipios Turísticos reciben de la Junta de Andalucía un diez por ciento de la Participación en los Tributos de la Comunidad Autónoma (PATRICA), lo que supone para Cazorla unos 50.000 euros y para Baeza 100.000 aproximadamente.

Mejora constante

Estas ayudas deben ser empleadas para mejorar la oferta turística y cultural de la localidad o para trabajar en aspectos que faciliten la estancia de los turistas, como la accesibilidad. De hecho, la Junta obliga a que los ayuntamientos pongan un cartel visible en las intervenciones que se hagan con estos fondos en el que se explique de dónde viene su financiación. Precisamente en accesibilidad es donde más está trabajando el Ayuntamiento de Cazorla, tal y como explica su concejala de Turismo, Nuria Serrano.

«En temas de promoción es muy positiva esta catalogación porque implica un nivel de calidad en el turismo. En nuestra localidad este sector representa prácticamente el 40 por ciento de la economía local por lo que invertimos lo que recibimos en mejoras turísticas. Hemos hecho reformas en el teatro, ampliado la oferta cultural y de ocio, contamos con cuatro oficinas de turismo e incluso hemos realizado un Plan de Igualdad», añade Serrano.

Por su parte, Inmaculada Serrano, técnico de Turismo de Baeza, cuenta cómo, a pesar de que la localidad baezana recibió en 2017 el título de Municipio Turístico tuvo que luchar por él también el año pasado, ya que aumentaron las exigencias. «Nos pidieron un Plan de Calidad en el turismo local y hace apenas una semanas nos confirmaron que volvemos a cumplir con todos los requisitos, por lo que seguimos con la catalogación», aclara Serrano sobre la continua justificación que es necesaria.

Ambos municipios debieron elaborar unos expedientes en los que se tiene en cuenta, por ejemplo, que tengan en sus planes la conservación de los recursos naturales que rodean al municipio u ofertas que faciliten el turismo a las personas con algún tipo de discapacidad. Un claro ejemplo de las posibilidades que existen al respecto son las maquetas de la ciudad de Baeza que hay en su plaza principal, en las que las personas invidentes pueden palpar en bronce el relieve de sus principales monumentos.

En 2017 además Baeza acogió una reunión de todos los Municipios Turísticos de la comunidad autónoma, en la que todos se pusieron de acuerdo en que dicha catalogación debe ser utilizada con un mayor énfasis como aval de calidad y es que en ese sentido están evolucionando las exigencias que se hacen desde la Junta de Andalucía.

Se trata de un círculo vicioso positivo y es que a mayor número de visitantes más inversión y esta conlleva una mejora en el reclamo turístico con el que cuentan estos municipios jienenses.





DESP. Úbeda, La Iruela y Baños de la Encina luchan por ser incluidos en este selecto grupo

J. MUDARRA A estos dos Municipios Turísticos (Cazorla y Baeza) se podrían sumar otros tres en un futuro no muy lejano. Siguiendo el ejemplo que protagonizan ambas ciudades se encuentra, entre otras, Úbeda.

El principal escollo con el que se encuentra la ciudad ubetense es que la forma en que está redactado el decreto le hace prácticamente imposible demostrar el volumen de turismo que recibe. Debe contabilizarse el número de turistas en un solo espacio y este ser cinco veces superior al de la población, que en el caso de Úbeda es de 36.000 habitantes. La concejala de Turismo, Elena Rodríguez cuenta que desde el Ayuntamiento siguen trabajando para encontrar la fórmula que les permita demostrar que el número de pernoctaciones y el flujo de visitas de su ciudad cumple con los requisitos. «Nos interesa mucho ser declarados Municipio Turístico, por lo que esto supone en promoción y también por la ayuda económica que implica», adjunta.

El condicionante de un elevado número de población no existe en casos como La Iruela, que es la localidad jienense que más cerca se encuentra de conseguir la catalogación. El hecho de ser como quien dice puerta de entrada al parque natural de las Sierras de Cazorla, Segura y las Villas hace que pueda demostrar con facilidad el enorme flujo turístico que alberga.

Algo similar le ocurre a Baños de la Encina. En su caso el expediente está aún en un estado inicial, ya que desde el Ayuntamiento se encuentran trabajando en la creación de un Plan de Calidad para su turismo que sirva para cumplir con los requisitos. En su caso, con una población de 3.400 habitantes, las exigencias en cuanto a pernoctaciones y visitantes parecen estar cumplidas.