El arte solidario de Aboubakar Aminou queda plasmado en Vilches

Aboubakar, que tras llegar a España estuvo tutelado en el Centro de Protección de Menores Carmen de Michelena de Jaén, donde dejó huella por su empatía, humanidad, talento y arte, llegó al Colegio Nuestra Señora del Castillo para ofrecer una charla a escolares y maestros y deleitar a unos y otros con las fotografías de sus trabajos plásticos.

Grego Vallejo, docente del centro, recuerda que fue a finales del primer trimestre cuando el colegio desarrolló una recogida de material escolar para donarlo al 'Proyecto Rajab' del Secretariado de Inmigraciones: «Durante aquella fase de recepción tuvimos la visita de Aboubakar que nos ganó a todos por su simpatía, su dominio del español y su relato sobre las dificultades a las que se enfrentó desde que salió de Camerún hasta alcanzar España. Nuestro centro le invitó a participar en el proyecto de Paz e Igualdad colaborando junto al alumnado en la realización de un mural con el lema: 'Vilches es un lugar de paz, diversidad cultural y de igualdad'. El joven camerunés, que acababa de cumplir la mayoría de edad, se sintió motivado y de manera desinteresada volcó su entusiasmo en plasmar la maravillosa pintura que hoy adorna la pared del colegio», destaca el docente.

Asistido por su novia Marina y por la mirada contemplativa y las manos inquietas de los pequeños escolares, Aboudakar Aminou recreó su arte a la hora de plasmar rincones emblemáticos como el Cerro de la Virgen del Castillo, restos de la vieja fortaleza árabe, cruce de caminos, campos de olivos y una joven pareja que dirige la mirada hacia un árbol con hojas de color, pura metáfora del amor, esperanza, vida.

Mientras pintaba, los niños disfrutaban del proceso creativo de una obra que destaca por la realidad y racionalidad en los detalles, por ver como la imagen real se puede incorporar al contexto del cuadro y sobre todo porque parece dibujado en 3D. Acabada la obra, el pequeño espectador juega sin prejuicios con la gracia de esta pintura mágica y sugerente que al ser mirada desde ángulos diferentes permite procesar distintas informaciones visuales ante los ojos. Aparecen así objetos y figuras que sobresalen del terreno, así que mientras unos desfilan por una atmósfera sugerente, otros conducen por los caminos del realismo mágico. De una forma u otra la huella tridimensional del joven migrante camerunés ha quedado plasmada para siempre en el corazón del colegio de Vilches.