Victoria amarga para el Roquetas

Los roqueteros hicieron valer su principal arma, la superior motivación, para conseguir una victoria imprescindible para mantener sus aspiraciones para continuar en Segunda División B, ante un rival, a priori, con un mayor potencial, el Betis B. De este modo, los roqueteros saltaron a la cancha con gran ímpetu y pusieron cerco al área visitante y, en el minuto 4, en una jugada de Rubén Rivera que terminaba en un medido centro al área verdiblanca, para que rematara su compañero Mara, éste era sujetado por un defensor verdiblanco y el colegiado valenciano no dudaba en señalar el punto fatídico.

Gol en el minuto 4

El especialista roquetero, Raúl Guillén, cogió el balón, lo depositó en el punto, en los 11 metros, dispuesto a lanzar, y consiguió su objetivo. Mandó el esférico lejos del alcance del guardameta y puso a su equipo en ventaja, en un tanto que tenía gran importancia para el planteamiento local, de adelantarse para afrontar el choque con tranquilidad y utilizar el contragolpe, sin tener que conceder espacios en su espalda. El encuentro se tornaba muy favorable para los de Ortega. El Betis, no obstante, mostró de nuevo su perfil de filial y siguió luchando para llevar el peso del partido, para marcar el ritmo del choque, buscando el marco de Javi Ruiz, que se mostraba muy seguro, al igual que sus compañeros de la zaga. Los del Poniente almeriense habían conseguido la solidez defensiva buscada y frenaban al segundo mejor ataque del grupo.

Sin embargo, los roqueteros, tras su derrota frente al Ceuta, no dependían de sí mismos, sino de otros resultados, y las noticias no eran halagüeñas. Los resultados que se estaban dando en los otros dos campos en los que 'también jugaban' los almerienses eran negativos para sus intereses, ya que el Écija, equipo que ocupaba la primera plaza que concede la permanencia directa, ganaba a la Balompédica Linense su encuentro, y en el derbi murciano, se producía el único resultado que no era favorable para los intereses de los de Ortega, ya que el Lorca, el equipo que le superaba en un punto en la tabla, vencía al Caravaca, con el que estaban igualados los del Poniente.

En el Estadio de Los Bajos, los roqueteros continuaban buscando el marco de Bernabé y, en el minuto 44, llegaba una acción decisiva, en un momento psicológico, ya que en otra jugada de peligro en el área verdiblanca, el colegiado señalaba otra vez la pena máxima, en una jugada que, en esta ocasión, tenía también efectos secundarios, ya que le costaba la expulsión al guardameta visitante, Bernabé, por lo que su equipo se quedaba con 10 hombres y 1-0 en contra, cuando el Roquetas iba a lanzar un penalti.

Gol de la tranquilidad

El capitán cumplió con su parte y volvió a transformar la pena máxima, por lo que su equipo se marchaba en el marcador, con un 2-0 que aportaba ya más tranquilidad, y con superioridad numérica. El partido se ponía claramente favorable, aunque el triunfo perdía gran parte de su valor debido a los demás resultados que se daban.

En la segunda mitad, el Betis, pese a contar con un hombre menos, siguió atacando, y fruto de una de estas jugadas llegó el tercer penalti de la tarde, en una jugada en el área local, entre David Agudo y Fran López. Al colegiado tampoco le tembló el pulso y se fue hacia el punto fatídico. Agudo se encargó de ejecutarla y superó a Javi Ruiz, que había aguantado muy bien pero no pudo alcanzar el lanzamiento.

Con las distancias en el marcador ajustadas, los roqueteros aún tuvieron que sufrir, pese a contar con un hombre más, pero se defendieron ordenadamente hasta que el colegiado valenciano pitó el final del duelo. Los roqueteros seguirán en puestos de descenso y para salvarse, deberán vencer a domicilio a la Balompédica Linense y aguardar otros resultados.