El nivel de ruido en fin de semana en algunas calles del centro de Almería supera en un 60% lo permitido

Tal y como contó este diario a final del año pasado, el Ayuntamiento de Almería lleva trabajando desde hace muchos meses en la confección y posterior tramitación para su puesta en marcha de un plan zonal mediante el que se persigue reducir la emisión de ruidos existente en la zona más céntrica. Actualmente existe una área delimitada en la capital que por su elevado nivel de ruido está catalogada como ZAS (Zona acústicamente saturada) y que puede verse en el mapa que acompaña a esta información. Gracias a ello está sujeta a una serie de restricciones, como por ejemplo no dar más licencias de apertura a establecimientos de ocio nocturno. Estas medidas se quieren extender ahora a otras zonas pues el área ZAS en vigor se ha quedado pequeña.

El incremento de este contorno más garantista para el descanso, viene como consecuencia de la proliferación en los últimos años de nuevos establecimientos en más puntos de la ciudad o del surgimiento de nuevas fuentes de emisión de ruido. En la memoria del plan zonal que se quiere activar, aparecen mediciones que ponen en evidencia la necesaria puesta en marcha de estas modificaciones.

Los datos recogidos en el trabajo de campo por la empresa a la que se le encargó el estudio son esclarecedores. Midieron en horario nocturno (de 23 a 7 horas) un total de 37 puntos concretos de la zona centro, calles y plazas míticas como Masnou, De las Tiendas, Jovellanos, entre otros. El resultado ha sido que el 81,1% de ellos superaba en algún momento de la semana los límites permitidos por la normativa para zonas eminentemente residenciales. La ley establece que en estas áreas y ya entrada la noche no se pueden superar los 55 decibelios, y en cambio los niveles medios durante el fin de semana en 30 de los 37 lugares medidos los sobrepasaban ampliamente.

En todos ellos el listón sonoro ambiental producido por la concentración de las actividades existentes, y por las de las personas que las utilizan, superan los objetivos de calidad acústica, pues exceden o igualan los valores establecidos para el periodo nocturno. Y en algunos de los casos de forma alarmante. Por pura lógica, aunque la medición se hizo durante todos los días de la semana, fueron los viernes y los sábados en los que se constató más nivel de ruido. Sobre todo en las calles que componen el polígono ZAS ya definido. Si el máximo permitido son 55 decibelios, elocuentes son los 87,03 registrados en la plaza Masnou el sábado en el que se realizó el ensayo, casi un 60% más de lo permitido. Este fue el pico más alto de ruido de toda la zona analizada.

Un lugar en el que se alcanzan niveles indeseables todas las noches de la semana a excepción del lunes, como bien aparece en la tabla que se adjunta a esta página. Este lugar es por todos conocido por ser quizás el epicentro de la marcha en Almería. Pero no es el único, junto a esta emisión de ruidos desproporcionada también aparecen otras en lugares clásicos de la vida de ocio nocturna como la calles San Pedro, Antonio González Egea, Trajano, Eduardo Pérez o Padre Luque, entre otras. Como se observa, en cada una de estas los valores medidos superan con creces, en algunos casos en más de un 40%, la contaminación acústica aconsejable. Mediciones algunas que superan los 65 decibelios incluso fuera de los días propios de la fiesta. Ocurre por ejemplo en la calle Las Tiendas, que alcanza casi los 70 decibelios un día de domingo, según la memoria del plan zonal elaborada por el Ayuntamiento a través de una empresa externa.

El análisis, que se ha llevado a cabo mediante evaluaciones a nivel del primer piso de viviendas (cuatro metros de altura) en las calles incluidas en el área de estudio, ha confirmado que es pertinente ampliar la superficie de la zona ZAS pues existen calles y plazas fuera de ella hoy que cumplen las condiciones para que se apliquen restricciones severas. Ejemplo de ello son la citada Las Tiendas o las calles Jovellanos y Real o la plaza de las Flores, por poner solo algunos ejemplos.

La intención del equipo de gobierno es que antes de que acabe el año, esta medida pueda salvar toda la burocracia pendiente de cara a entrar en vigor. En el momento en el que así sea, y una vez que el Ayuntamiento ya ha puesto el plan zonal en la página web de Urbanismo para que se pueda consultar y proponer cambios... etc., en la nueva zona saturada se aplicarán las restricciones pertinentes. La propuesta es ampliar el radio hacia el Norte y el Oeste, hasta la Puerta Purchena por un lado, y la plaza de la Constitución por otro.

Entre las acciones que implica, la imposibilidad de abrir más establecimientos de hostelería o la amortización de licencias dadas a locales si estos se quedan vacíos por más de seis meses... etc. Mientras entran en vigor estos cambios, el Consistorio aprobó a principios de marzo un decreto de medidas para minimizar el ruido en la zona centro. En él se proponía la limitación de velocidad en algunas calles, así como el recorte horario de las terrazas y veladores.