Almería cierra una campaña con más kilos pero menos precio

En este sentido y según los datos que hizo públicos ayer la organización agraria Asaja Almería, ha sido una campaña donde la extensión de cultivo bajo plástico prácticamente se mantiene, se incrementa la producción con respecto al año anterior, pero desciende el valor de la producción, derivado de una bajada de los precios de venta.

Así, esta campaña 23/24 ha contado con 33.100 hectáreas de extensión, lo que implica un 0,61% más que la anterior y una superficie de producción que también se incrementa en un 1% hasta las 49.316 hectáreas. Pese a que la subida de extensión ha sido mínima, la producción sí ha aumentado un 14% hasta los 3,82 millones de toneladas. Unas cifras que podrían haber dejado una campaña de récord si no fuera porque el valor de la producción se reduce un 22% con respecto a la campaña pasada hasta los 2.632 millones de euros. Todo ello en un contexto en el que Blanque recordó que el incremento de costes se mantiene, por lo que «el margen cada vez se hace más estrecho para el agricultor».

La presidenta de Asaja Almería,Adoración Blanque, señaló a un incremento en todos los principales productos que se cultivan bajo plástico en Almería, si bien las mayores subidas se producen en pepino y calabacín, cultivo este último que Blanque calificó como «producto refugio» puesto que es al que tienen los agricultores cuando se encuentran con algún problema durante el desarrollo de su cultivo y tienen que finalizar antes de lo previsto el ciclo.

En el lado contrario se sitúa el tomate que tras un ligero repunte en los últimos años, esta campaña vuelve a perder peso y pierde un 6% de su superficie con respecto al año pasado. Un descenso que Blanque relacionó principalmente con las dificultades que los productores están teniendo derivado de la incidencia del virus del rugoso, pero también por el elevado coste de mano de obra que requiere y la volatilidad de precios.

Sin ir más lejos, esta campaña la producción ha superado el millón de toneladas, con un incremento de producción del 8%, pero el precio medio ha caído un 18% y el valor de la producción un 9%. Y es que solo en la primera parte de la campaña, entre septiembre y la primera quincena de diciembre el precio fue más elevado, coincidiendo con un momento de pocos kilos, como recordó la presidenta de Asaja, quien también señaló a que desde enero el precio cayo debido a un incremento notable de la producción, provocando que «la mitad de la campaña el tomate haya estado por debajo de los costes de producción».

En pimiento, principal producto que se cultiva en Almería, la superficie se incrementó un 0,7% hasta las 12.550 hectáreas y la producción creció un 4% hasta superar el millón de toneladas con un precio medio que, sin embargo, bajó un 33% con respecto a la anterior. Pese a ello fue uno de los productos que mejor comportamiento tuvo esta campaña.

En pepino, la producción aumentó un 13% hasta superar las 670.000 toneladas, si bien el precio medio bajó un 22% situándose en 59 céntimos de euro el kilo.

El peor parado fue, sin embargo, la berenjena puesto que un incremento de la producción del 5% generó un descenso del precio medio de venta del 48% con respecto a la pasada campaña, además de hasta tres extensiones de norma de calidad.

Los cultivos de primavera, melón y sandía son los que registraron mejores datos con incrementos tanto de producción como de precios.