Medio millar de personas secunda la llamada para ser una ciudad-refugio

Media docena de niños encabezaron la protesta con mensajes en contra de los conflictos bélicos que recorren buena parte de la ribera africana y asiática del Mediterráneo y que están en el origen de la actual llegada masiva de personas al continente europeo. Estos lemas se alternaron con consignas más políticas a favor de la declaración de Almería como 'ciudad-refugio', una red promovida por varias capitales españolas (como Barcelona o Madrid) que persigue que consistorios como el almeriense tomen la iniciativa a favor de estos acogimientos con un plan más o menos autónomo para gestionar la llegada y permanencia de los desplazados así como canalizar la ayuda que puedan suscitar. Al término del acto, Rafael Yuste Moyano, jesuita responsable de inmigración y director del Centro Indalo Loyola, y la abogada Francisca Rosario Medran Cabrera leyeron un manifiesto en este sentido.

La mayoría de los partidos políticos almerienses (con y sin representación), así como fuerzas sindicales y organizaciones religiosas y civiles participaron en esta marcha. Cabe señalar que el próximo pleno acogerá un debate sobre este tema.

Los organizadores también aprovecharon para cuestionar la respuesta dada hasta ahora por las autoridades europeas. Según cifras de Amnistía Internacional, desde el comienzo de la crisis de Siria se han ofrecido en todo el mundo 104.410 plazas de reasentamiento, «lo que equivale al 2,6% de la población de refugiados sirios de Líbano, Jordania, Irak, Egipto y Turquía».