El trabajo «ejemplar» de Protección Civil en tiempos de coronavirus

En esta localidad de Sierra Mágina se centran en cuatro aspectos: información a la ciudadanía, atención especial a las personas vulnerables, ayuda domiciliaria y apoyo en la desinfección de zonas públicas.

Para informar a los vecinos de las últimas medidas o de las actuaciones desarrolladas en el municipio recurren sobre todo a las redes sociales, donde van colgando información de interés público como por ejemplo cómo han de usarse las mascarillas o cómo evitar contagios al hacer la compra. También ofrecen asesoramiento para la cuarentena.

Otro pilar es la ayuda a personas vulnerables, generalmente mayores por lo que dedican especial atención a quienes viven solas. «Aunque tienen ayuda a domicilio, sabemos que no les es bastante y menos en estos días en los que quizás lo que más necesitan es el contacto humano», explica Lorenzo Díaz. Él se encarga de llamarlos a diario para preguntarles si necesitan algo y ha comprobado el beneficio que genera una simple conversación telefónica ahora que no pueden salir a la calle.

A todo lo anterior hay que sumar la ayuda domiciliaria, es decir, abastecerlos de alimentos, medicinas y productos de primera necesidad, además de la colaboración a la hora de desinfectar las zonas públicas del municipio. La comunicación con el centro de salud y el Ayuntamiento es continua para ayudar a todo aquel que lo necesite.

Al igual que en otros pueblos de la provincia, los vecinos de Bélmez de la Moraleda se han organizado para hacer mascarillas caseras. El Ayuntamiento, a través de Protección Civil, las ha ido repartiendo casa por casa primero a los mayores y niños, y luego al resto de la población. «Aunque los pequeños no pueden salir, les hicimos las suyas porque también era una manera de concienciarlos de que cuando se salga hay que hacerlo bien equipado, y mantener las distancias de seguridad», apunta Díaz.

Otro servicio que han puesto en marcha ha sido la ayuda a los mayores para que puedan cobrar sus pensiones sin pasar por las oficinas bancarias. «Las cajas nos ayudaron en esa labor porque permitieron hacer una telegestión asistida, conseguimos que no tuvieran que bajar ellos directamente a la caja», explica.

14 voluntarios conforman la agrupación de Protección Civil de Bélmez de la Moraleda, que nació hace ocho años coincidiendo con el inicio de la crisis económica y ahora afrontan una pandemia en primera línea de batalla. Ellos, junto con el resto de voluntarios del país, son un ejemplo a seguir por su compromiso con la sociedad.