Martos quiere una farmacia en el casco antiguo del municipio

Se trata de un barrio que cuenta con una población de más de 2.500 habitantes, tal como indican desde el Ayuntamiento, de los que más del 20% cuenta con una edad superior a los sesenta años, a lo que se suman la mayor demanda de medicamentos por parte de los residentes y, «por supuesto, las propias dificultades de la movilidad debido a la edad y a las características orográficas, la complicación de la trama urbana y, también, los problemas de accesibilidad del propio casco histórico», subrayan.

«Esperemos que la Delegación Territorial de Salud la Junta de Andalucía sea sensible a esta petición y acceda a autorizar una farmacia en el casco histórico por el bien de nuestros ciudadanos. Le hemos pedido que realice de manera excepcional la revisión del expediente con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas que habitan el casco antiguo. Para ellas, suele ser más difícil desplazarse a un punto más lejano por su propia condición. No es un capricho de este Ayuntamiento, sino una necesidad», señala el alcalde.

Por su parte, desde la Delegación Territorial de Salud y Consumo en Jaén se aclara que la solicitud de autorización de la mencionada farmacia se llevó a cabo hace 14 años.

«Ha sido el actual Gobierno andaluz el que ha retomado el asunto y ha requerido a través de un escrito dirigido al Ayuntamiento de Martos, que se pronuncie sobre la solicitud que, se insiste, data de hace casi tres lustros», declaran.

Hacen hincapié en que hasta ahora, el Ayuntamiento de Martos «no se había pronunciado al respecto públicamente» y la respuesta al escrito de la delegación no viene a fundamentar la solicitud ni actualiza en profundidad la misma.

Así pues, subrayan que «conviene tener en cuenta» que ha sido la Delegación Territorial de Salud y Consumo en Jaén la administración que ha iniciado el trámite «para aclarar la situación en la que se encuentra el expediente», por lo que pide al Ayuntamiento «lealtad institucional» y que «no traslade un mensaje erróneo» a la opinión pública.