«La historia evidencia que Viator es lo que es gracias al Campamento de la Legión»

No fue hasta dos décadas después cuando el concejal de Educación, Patrimonio Cultural e Histórico y Atención al Ciudadano, Miguel Ángel Sánchez, reparó en él y decidió que había llegado el momento de editarlo para que los vecinos tuvieran constancia de la evolución de su pueblo en los últimos cinco siglos. «Más que un libro en sí puede considerarse como una manual de consulta, una publicación divulgativa para conocer la historia de este pueblo», reconoce Aguilera.

A partir de las 21.00 horas de hoy la Casa de la Cultura acoge la presentación en sociedad del libro 'Viator, de arrabal a ciudad en cinco siglos', cuyo título originario es el de 'Viator: apuntes para su historia'. Precisamente una puntada tras fue dando su autor, fallecido en 2008, para que esta obra viera la luz tras un laborioso trabajo de ratón de biblioteca. «Para documentarse viajó en numerosas ocasiones a Granada al archivo de la Real Chancillería. Presencialmente también estuvo en el archivo secreto del Vaticano». Además, como desvela el editor, el religioso se valió de todo tipo de autores que hicieran reseña en sus textos al municipio para tener un mayor conocimiento de su historia y realidad. Entre estas consultas se encontró el 'Diccionario geográfico-estadístico-histórico' de Pascual Madoz.

«Ha habido días que me he quedado hasta las cinco de la mañana pasando a ordenador el texto». Un concienzudo trabajo que le sirvió para conocer fechas claves de la historia de su localidad. Como por ejemplo que «en 1493 se habla por primera vez de Viator en un libro, en concreto en el Libro de Repartimiento de la Ciudad de Almería» o que «en 1904 en un periódico de Madrid se publica una página completa con las fiestas de Viator».

Son, sin lugar a dudas, apuntes sorprendentes que ahora ven la luz y que durante todo este tiempo han pasado inadvertidos para los vecinos. Pero hay muchos más detalles curiosos en una obra que se vertebra en tres partes. «Evolución histórica de Viator del siglo XV al XVIII, por aquellos entonces Viator era el arrabal de Huércal de Almería. La segunda parte es la relacionada con los recursos y la tercera alberga los aspectos religiosos. Sin la iglesia no se habría podido conseguir tanto recurso histórico para escribirlo», asegura Aguilera.

Son muchas las conclusiones que durante tantas jornadas de lectura del manuscrito ha extraído. «Una de las cosas que más me han llamado la atención del libro es que se puede llegar a la conclusión de que Viator es lo que es gracias al Campamento de la Legión. Gracias a él se consigue la construcción del puente que une la localidad con la vecina Huércal de Almería. La construcción del puente, cuya tramitación arrancó el 17 de febrero de 1911, costó 366.120,06 pesetas y fue inaugurado el 7 de julio de 1929».

En efecto, la presencia militar en la historia reciente del municipio del Bajo Andarax es más que una constante. «El Campamento es la obra que hace que Viator haya crecido. Fue empeño de Álvarez de Sotomayor». No obstante, su ubicación no estuvo exenta de polémica, porque «hubo intención por parte de Almería para que se levantara en El Alquián, pero el verdadero empeño lo puso Álvarez de Sotomayor por llevarlo a cabo a las faldas de Sierra Alhamilla a pesar de los problemas de abastecimiento de agua. Lo consideró desde el principio una zona clave para la preparación del ejército».

En aquellos timpos las contiendas militares en el Norte de África desvelaban a políticos, militares y sociedad en general. «El proyecto del Campamento se ideó en función de la guerra que tenía España con Marruecos» y con la constancia de que «los franceses en Argelia llevaban gastados 2.000 millones de francos y 100.000 soldados fallecidos».

Pero no toda la prosperidad se puede achacar al ejército, si bien tuvo buena culpa de ello. «La historia de Viator está relacionada económicamente con el esparto, que se exportaba a Inglaterra; más de 50.000 toneladas al año. Se esquilmaron los montes. Y el esparto dio paso al parral, pero como consecuencia de los efectos de la filoxera, se produce su sustitución por la naranja. Se habla de que este cultivo se extiende desde Viator al resto de la comarca del Andarax», apunta.

Una economía que se vio catapultada por las comunicaciones. «Se hacían durante esos años en tartana, un carro con techo y asientos. La primera la puso en marcha Antonio Morales. Después se adquirió un coche a pedales. Pero el verdadero precursor de la línea de comunicación fue Ramón del Pino quien en 1918 puso en marcha un vehículo con más asientos. El conductor ganaba dos pesetas y los viajeros pagaban 10 céntimos por viajar a Almería. En 1929 se amplió la línea al Campamento y en 1934 se introdujo un autobús de la marca Internacional, era 'La Parrala'».

Dentro de las fechas que más han llamado la atención al editor se encuentran algunas muy relevantes. «En 1526 había 15 vecinos en el pueblo. En 1570 se expulsa a los moriscos que no quisieron convertirse al cristianismo por orden de los Reyes Católicos y Viator se queda despoblada. En 1835 la Reina Regente insta a que Viator tenga su propio Ayuntamiento. En 1888 había un ferrocarril estrecho de Sierra Alhamilla, para las minas. Y en 1895 se inauguró la línea de la estación de Huércal», enumera.

El periodista revela que «el libro iba a salir publicado en 2020, coincidencia con la celebración del segundo centenario de la primera independencia de Viator de la ciudad de Almería, pero la pandemia lo impidió, como hizo con otras muchas cosas».Fue la primera porque «en 1823 Viator volvió a depender de Almería y definitivamente en 1835 se consiguió la independencia».

El Covid-19 retrasó la presentación de esta obra, pero eso no supuso un revés, sino todo lo contrario. «Aprovechamos antes de la pandemia para pasar el libro entero a ordenador y durante la pandemia se 'decoró', se le fue dando forma y corrección; se eliminaron algunos vicios», por tanto la adversidad se tornó en fortuna.

Hace hincanpié en que «el libro ha tenido mucho trabajo tanto para su creación como para su edición». De hecho en junio del año pasado a través de las redes sociales el Ayuntamiento de Viator hizo un llamamiento a sus conciudadanos para que aportaran fotos antiguas con las que ilustrar tanto las páginas del libro como su portada, pero la gente no fue muy participativa.

No obstante, el Consistorio va a gratificar a todos aquellos que han hecho posible que lo descubierto por el religioso Enrique Silva quede plasmado en una publicación. «Se han editado 150 ejemplares, lo ha hecho el Ayuntamiento de Viator y los va a regalar a la gente que ha participado en la confección del libro con fotos o con otras aportaciones», explica Aguilera. «Una vez que se presente a través de la Iglesia se va a hacer una segunda edición previo encargo para donar los ingresos a una ONG por determinar».

El motivo de presentarlo ahora es por la coincidencia con las fiestas en honor a la patrona del municipio María Santísima de las Angustias.