La Red de Alerta e Información Fitosanitaria de Andalucía publica medidas preventivas frente al trips Parvispinus

Poco tiempo después se detectó en plantones de cítricos y tras una campaña se identificó en plantaciones de pimientos de verano en Murcia y Alicante, igualmente en plántulas de lechuga y otros cultivos ornamentales.

En 2018 se hizo la primera identificación en Andalucía en ornamentales en la costa de Granada, posteriormente en 2020 se identificó en Almería también en ornamentales y otros cultivos como el pimiento, aunque de manera muy esporádica.

Sin embargo, durante las dos últimas campañas su presencia en los cultivos bajo plástico y concretamente en pimiento ha crecido exponencialmente. Esta campaña ya afecta en mayor o menor medida, a gran parte de las plantaciones de pimiento del Poniente almeriense y ya hay constancia de fincas que han tenido que ser arrancadas en la zona de Tierras de Almería, así como de Berja y Dalías.

Thrips parvispinus tiene una temperatura mínima de desarrollo estimada en 12,3 ºC, por lo que en los meses de frío baja su presencia, pero las condiciones ambientales de las áreas mediterráneas no parece que limiten su actividad a lo largo del año, si bien, en el periodo invernal se ralentiza la actividad y parece tendría dificultades para sobrevivir al aire libre, en el caso de nuestros invernaderos la RAIF indica que este trips se observa durante el mes de abril hasta alcanzar su máximo de presencia en octubre.

La dispersión de esta plaga larvas son ápteras y las prepupas o pupas tienen movilidad reducida y los adultos realizan vuelos cortos, por tanto la dispersión a larga distancia se produciría en el material vegetal y a media distancia el viento podría desplazar a los adultos que se encuentren en vuelo activo sobre el cultivo contaminado.

Como medidas preventivas y culturales, la RAIF incide en la hermeticidad de los invernaderos, mallas antitrips en ventanas y bandas, dobles puertas, limpieza de malas hierbas y restos de cultivo, uso de material vegetal sano procedente de viveros o semilleros autorizados, no asociación de cultivos, rotación de cultivos, abonado equilibrado para evitar exceso de vigor, favorecer la proliferación de poblaciones de insectos auxiliares, racionalizando el uso de productos fitosanitarios entre otras.

En este sentido el delegado territorial, Antonio Mena, ha declarado que casi el 100% de la superficie productiva de pimiento se realiza bajo Control biológico, donde el uso de Organismos de Control Biológico y uso de productos fitosanitarios respetuosos con los mismos, lleva a obtener unos resultados excepcionales en cuanto a control de plagas y enfermedades. «No podemos bajar la guardia para evitar la proliferación de Thrips parvispinus, esta plaga puede estar controlada de manera óptima en los invernaderos con el uso del control biológico en el cultivo de pimiento», señaló Mena.

Se ha comprobado que el uso de organismos de control biológico es esencial y eficiente para realizar un buen control de este trips, insistimos en que es fundamental la detección precoz de la plaga, incrementando la dosis de suelta sobre todo de Orius laviegatus en los focos iniciales de presencia.

Se recomienda de forma preventiva para el control de esta plaga, Orius laviegatus, Amblyseius swirskii y Amblyseius cucumeris y para la fase de pupa en el suelo e recomienda utilizar ácaros de suelo (Hypoaspis miles) y nemátodos entomopatógenos (Steinernema feltiae), para su control.