«Los aranceles de Trump no son el fin del mundo»

El consejero de Agricultura, Ramón Fernández-Pacheco, llama a la calma al sector. «Lo primero que hay que decirle a los productores de aceite de oliva es que estén tranquilos, que los aranceles no son el fin del mundo». A su juicio, «si hemos sido récord de exportaciones en el año 2024, teniendo el aceite de oliva a 10 euros el litro en origen, ahora que está a 3,25 euros, que se imponga un arancel del 10 por ciento no afectará, porque todavía está el aceite más barato en el lineal americano que el año pasado». Por lo tanto, «que nadie se preocupe ni se vuelva loco vendiendo porque somos aún competitivos».

Además, hace hincapié en que para el consumidor norteamericano «el aceite de oliva es un producto de excelencia asociado sobre todo a la salud» y reitera que «ya nos demostró el año pasado que estaba dispuesto a pagar por el aceite de oliva» a más de diez euros el litro.

Según Fernández-Pacheco, «los aranceles que se están planteando no van a suponer para nada un retroceso del consumo de aceite oliva».Sostiene la afirmación indicando que «Estados Unidos produce una cantidad ínfima de aceite en relación a lo que consumen ellos» y España ya ha adelantado a Italia como el país que más aceite de oliva les suministra.

El consejero es consciente de que «no podemos renunciar a ese mercado tan importante solo porque Donald Trump ahora juegue cada mañana a si nos sube o nos baja el arancel».

En cuanto a la propuesta del ministro de Agricultura, Luis Planas, de restringir la venta de aceite de oliva para evitar la caída de precio el consejero no la ve mal. «A 3,25 euros el litro en origen como está ahora hay muchos agricultores que están que están perdiendo dinero; no les salen las cuentas».

Sobre las medidas, «hemos puesto en marcha la primera estrategia andaluza del olivar, que tiene un presupuesto de más de mil millones de euros para trabajar todas esas líneas que son estratégicas para que el cultivo predominante en Andalucía, el del olivo, siga ganando peso».