Unicaja Almería quiere 'salir del laberinto de los espejos' y plantarle cara al virus
Con asistencia limitada ·
Debuta guardando mucha cautela frente a una incógnita como Arenal Emevé, en el primer evento deportivo con público en la provincia desde que llegó la Covid-19El voleibol regresa y lo hace seguro… y seguro, usando la polisemia en un eslogan con el que el club ha querido conjugar la rotundidad ... de ganas de la afición por asistir a su primer partido, con la certeza de que será un acto que no entrañará riesgo para la salud. Unicaja Almería ha trabajado muy duro para llegar a este día con todo listo, dentro y fuera de la pista. El equipo blanquiverde lo ha dado todo en los entrenamientos, tras dar la cara por la mala imagen de los dos últimos fines de semana consecutivos, y desde la directiva se ha empujado con todo lo necesario para que pudiera haber público y que esa asistencia fuese absoluta y completamente segura. Las horas posteriores han servido para comprobar que se ha respondido a la inquietud de la afición, para la que la convivencia con la Covid-19 se ha mostrado 'normalizada', arrojadas las grandes expectativas que ha levantado el debut liguero de los ahorradores.
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No en vano, han pasado siete meses desde que se disputara el último partido, allá por el 28 de febrero, un 3-1 frente a Teruel que dejaba casi sentenciada la primera plaza de la fase regular. Después. Fue que sí, que se acabó primero, pero por algo que nadie quería ni imaginar, un parón que, entre otras cosas, dejó sin viaje a Lugo a los ahorradores, choque con el que se echaba el telón antes de los playoffs. En la primera vuelta, y superada la vorágine de la competición europea, Unicaja Costa de Almería se alzó 'campeón de invierno' antes del parón de Navidad con un 3-0 sobre los lucenses (25-21, 25-19 y 25-20). En ese momento los de Diego Taboada ya se habían ganado el apelativo de 'equipo revelación', 12 victorias y 8 derrotas cuando el coronavirus llegó para arruinar la temporada. La dinámica ganadora, el gusto por los puestos altos, se tiene en esas tierras gallegas, y eso es todo un aviso.
Sin olvidar al rival
Manolo Berenguel ha oído ese aviso y lo va a tener en cuenta, pero con más mirada depositada en su propio lado de la red. Unicaja Almería tiene que arrancar, debe dejar de reflejarse de modo incierto en un laberinto de espejos y dar su verdadera imagen una vez entrado en competición. La Liga comienza, llega ya la máxima rivalidad cada fin de semana y tanto para los blanquiverdes como para los demás clubes participantes en el campeonato sacar los partidos de casa va a ser de vital importancia para las aspiraciones que cada cual tenga. Es más, tanto interés se ha tenido en que haya público, tanta ilusión, a su vez, se ha despertado, que se sabe que no se puede fallar, que debe fluir el voleibol que se lleva dentro, el que en cada entrenamiento deja satisfechos a jugadores y cuerpo técnico, pero que no ha podido aparecer en los cuatro partidos que se han disputado previamente.
Además, todavía con la ausencia del receptor cubano, que cuando llegue dará al equipo una gran aportación a la recepción y en ataque –es un jugador con un carisma necesario en la plantilla–, quizá disipe las posibles dudas generadas por el rendimiento de los blanquiverdes en esos dos fines de semana previos –el último con título en juego, perdido como en las últimas temporadas–. Ellos mismos ya hablaron esta semana al respecto, desconociendo los motivos por los que los buenos entrenamientos no tienen reflejo en el rendimiento en los partidos. Por eso toca disipar esas sensaciones en la cita de esta tarde, desde las siete.
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Respecto a 'los rastros' dejados por los de Manolo Berenguel en los partidos disputados hasta ahora, de ellos se puede nutrir un adversario sobre el que, por el contrario, no se tiene nada de información. Todo lo que se ha jugado por parte de Unicaja Almería está en el 'data' gallego, mientras que no hay nada de nada en el ordenador almeriense de Guille Carmona. Manolo Berenguel, pese a ello, tira de lo que se sabe de cada jugador individualmente y del 'libro de estilo' particular que define a su 'compañero' Diego Taboada. Para el técnico nijareño, el principal cambio experimentado por el equipo lucense es el del colocador, lo que supone posiblemente 'un nuevo libro de estilo', como ha sucedido con Arenal Emevé Lugo, ya que De Melo es ahora de Textil y ha sido suplido por Guillermo Loeches. Se conoce bien a este armador, pero esta temporada tiene otras 'armas'. Otra baja sensible es la del central 'made in USA' Matthew Knigge, que viste el amarillo de Guaguas, pero igualmente tendrá un gran sustituto, el canadiense Uchenna Ofoha.
La tercera baja es más difícil de predecir respecto a su repercusión, la de Luis Martín como opuesto, mucho carácter y calidad, suplido por un nuevo americano, Rattray, joven de 22 años que vivirá su primera aventura europea a través del cuadro gallego y en la Superliga española. Tres puestos clave con obligación de cambio, sí que se mantiene la pareja de receptores experimentados y peligrosos formada por Víctor Bouza y Chema Jiménez, así como el líbero internacional, recién llegado de Chipre con el Preeuropeo, Mario Dovale. Javier García y Rubén López, receptor y central, están en la nómina de renovados y habrá más sangre joven con la llegada desde Palencia de Iago Folgueira, central, y de Pau Mena, opuesto. Y sí, la juventud es un tesoro para el club gallego, como demuestra en su plantel de perlas.
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Un equipo joven
De hecho, son 16 los jugadores inscritos por Lugo, con Sebastian Tarta Razvan de tercer opuesto y siendo el 'mayor' de la hornada de la casa, puesto que se ha hecho toda una exhibición de juveniles que podrían debutar en la máxima categoría, y que está formada por Marcos Cela, colocador, Anier Mariño, central, Miguel Paradela, líbero, y los hermanos Pablo y Raúl Villar, colocador y receptor respectivamente. Es muy probable que la expedición a Almería, uno de los viajes más largos que van a tener que afrontar a lo largo de la temporada, no traiga consigo a todos, pero ahí se queda apuntada y admirada la media de edad solo 'rota' por uno de los clásicos del voley español, un Víctor Bouza cuya calidad está fuera de toda duda y que está en los 30 nada más. Pitarán los murcianos Fernando Cerrato y Julio César Santana.
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